Estados Unidos ofreció el lunes una recompensa de hasta 5 millones de dólares por el venezolano Joselit de la Trinidad Ramírez Camacho, funcionario del gobierno de Nicolás Maduro, a quien sumó al registro de fugitivos por lavado de activos y evasión de sanciones financieras.

Ramírez Camacho, actual superintendente de criptoactivos de Venezuela, fue incluido en el Programa de Recompensas de Delincuencia Organizada Transnacional del Departamento de Estado (TOCRP), y agregado a la lista de los más buscados del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), informó el Departamento de Seguridad Interior (DHS).

Señaló que la medida busca “acabar con la corrupción y la criminalidad vinculadas al régimen de Maduro”.

“El pueblo venezolano merece un Gobierno que haya elegido libremente y cuyos funcionarios no conspiren con sus asociados para cometer delitos de robo contra el pueblo de Venezuela, incluido el lavado de dinero para ocultar el producto de esas actividades ilícitas”, dijo el secretario de Estado, Mike Pompeo.

En una declaración, el jefe de la diplomacia estadounidense reiteró el compromiso de Washington de “ayudar a los venezolanos a restaurar su democracia a través de elecciones presidenciales libres y justas”.

En tanto, la Cancillería venezolana rechazó “enérgicamente” en un comunicado los anuncios de Washington, al señalar que “pretenden emprender una persecución” contra Ramírez Camacho a partir de “acusaciones infundadas extraídas de un mediocre guión hollywoodense”.

“Es evidente que en medio de las protestas masivas (…) y en medio de su crisis humanitaria más profunda en un siglo que ha cobrado más de 100.000 vidas, el gobierno de Donald Trump busca distraer la atención de la opinión pública reforzando sus prácticas ilegales y coercitivas contra Venezuela”, añadió el texto.

Estados Unidos lidera desde enero de 2019 la presión internacional para propiciar la salida de Maduro, cuya reelección en mayo de 2018 considera fraudulenta y a quien atribuye corrupción generalizada y graves abusos a los derechos humanos.

Ramírez Camacho, de 33 años, es uno de los inculpados por la fiscalía del Distrito Sur de Nueva York de blanqueo de capitales y evasión de sanciones del Tesoro estadounidense relacionadas con narcóticos, junto al actual ministro de Petróleo venezolano, Tareck El Aissami.

La acusación es parte de un megaproceso revelado el 26 de marzo por el Departamento de Justicia contra Maduro y 14 funcionarios y exfuncionarios venezolanos señalados de narcoterrorismo, corrupción, narcotráfico y otros cargos criminales.

Ese día el Departamento de Estado anunció además recompensas de hasta 15 millones de dólares por Maduro, y de hasta 10 millones por El Aissami, así como por el presidente de la Asamblea Constituyente, Diosdado Cabello, entre otros altos cargos venezolanos.

La lista de fugitivos de ICE vinculados a Venezuela incluye además a Raúl Gorrín, propietario del canal de televisión venezolano Globovisión, y al empresario venezolano José López Samark, también acusado junto a El Aissami y Ramírez Camacho.