La alcaldía de Buenos Aires amplió desde este martes el número de actividades comerciales permitidas en el marco de la cuarentena obligatoria que rige en Argentina desde el 20 de marzo pasado.

El gobierno nacional extendió la cuarentena en principio hasta el 24 de mayo, aunque con un plan de reapertura progresiva de actividades industriales y comerciales en varios distritos del país.

En el caso de la capital argentina, desde este martes ciertos comercios de venta de artículos no esenciales como librerías, florerías y perfumerías podrán reabrir sus puertas en horarios limitados y con rígidos protocolos de seguridad, según lo dispusieron las autoridades.

Para asistir a este tipo de comercios, la alcaldía dispuso un sistema de compras permitidas según la terminación del número de documento, en tanto limitó la cantidad de personas dentro de los locales.

Cafeterías y restaurantes podrán reabrir también, aunque sólo bajo la modalidad de compras para llevar.

Otra novedad será la posibilidad de salidas recreativas para los niños aunque sólo los fines de semana, en horarios preestablecidos y a no más de 500 metros de su domicilio.

Los parques y plazas públicas permanecerán cerrados al igual que las escuelas de todos los niveles de enseñanza.

Argentina registró 6.265 casos y 317 muertes por coronavirus, el 86% en la Ciudad de Buenos Aires y su periferia, la zona con mayor densidad demográfica del país.

En este conglomerado urbano viven unas 14 millones de personas, entre la capital y los 13 distritos que la rodean.

En los últimos días se registró un aumento de casos en las zonas metropolitanas más vulnerables.

La ciudad de Buenos Aires dispuso el inicio de testeos en las llamadas villas miseria, donde habitan hacinadas unas 240.000 personas.

Sólo en la llamada Villa 31, ubicada en los márgenes de los elegantes barrios de Recoleta y Retiro, dieron positivo el 67% de las pruebas realizadas en este asentamiento habitado por unas 40.000 personas.