Autoridades mexicanas deportaron este lunes a 240 hondureños, integrantes de la llamada “caravana migrante 2020”, en dos aeronaves que partieron desde la ciudad de Toluca (centro) con destino a San Pedro Sula. En total el país ha expulsado a más de 1.500 personas cuyo destino final era Estados Unidos.

“Se llevó a cabo el retorno asistido de 240 hondureños desde el Aeropuerto Internacional de Toluca, Estado de México, a San Pedro Sula, Honduras”, señaló el Instituto Nacional de Migración (INM) de México.

La institución dijo que la deportación de los hondureños contó con el apoyo de la Guardia Nacional mexicana y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (interior), así como de personal de Aduanas y Protección Civil.

Medios locales reportaron que con los hondureños expulsados este lunes suman al menos 1.500 migrantes deportados a ese país centroamericano desde que cientos de indocumentados ingresaron a México la semana pasada como parte de la “caravana migrante 2020”, que partió a mediados de enero de San Pedro Sula.

Por su lado, el gobierno de Honduras informó el jueves que hasta esa fecha un total de 1.754 hondureños habían sido deportados desde Guatemala y México.

Los centroamericanos ingresaron la semana pasada a México de manera ilegal desde Guatemala con la intención de llegar a Estados Unidos.

Pero efectivos de la Guardia Nacional detuvieron el jueves con golpes y gases lacrimógenos a 800 integrantes de la caravana que intentaban transitar por la frontera sur de México, lo que generó un ambiente de mucha tensión, e incluso una crisis de pánico entre mujeres y niños.

Organizaciones defensoras de derechos humanos, incluida la oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas, exhortaron al gobierno a “preservar la unidad de las familias migrantes” y a asegurar la no devolución de quien enfrenta riesgos de persecución.

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, avaló las acciones de la Guardia Nacional en la frontera sur del país e insistió en que su gobierno “respeta los derechos humanos” de los migrantes.

La caravana 2020, que salió el 14 de enero de Honduras, ha ido aumentando a su paso por Guatemala con la incorporación de migrantes guatemaltecos, salvadoreños y nicaragüenses.

Tras las multitudinarias caravanas de finales de 2018 y principios de 2019, el presidente estadounidense Donald Trump amenazó a México con sanciones comerciales si no tomaba medidas para detener la oleada migratoria.

López Obrador desplegó entonces unos 26.000 militares en sus fronteras norte y sur.