La presidenta del Senado de Bolivia, Adriana Salvatierra, presentó su renuncia a su cargo este domingo, tal como lo hicieron otras autoridades del país; el presidente Evo Morales, el vice Álvaro García Linera o el presidente de la Cámara de Diputados, Víctor Borda.

De acuerdo a la Constitución de Bolivia, en caso de renuncia del presidente y del vicepresidente, era responsabilidad de la presidenta del Senado, en este caso Salvatierra, asumir el Ejecutivo, previa aprobación del Parlamento.

“Nosotros queremos que las violencias se paren. Hago pública mi renuncia a la cámara de senadores”, indicó a la prensa la mujer de 30 años.

Sobre la sucesión el poder, Salvatierra indicó que como última medida convocará a una sesión del Senado donde se debería escoger a una nueva directiva, desde donde podría salir el nuevo mandatario de Bolivia.

A través de un mensaje televisivo, Morales anunció su renuncia este domingo, luego de tres semanas de protestas contra su reelección y tras perder el apoyo de los militares y la Policía.

El gobernante de izquierda, el primer mandatario indígena de la nación andina, había convocado más temprano nuevas elecciones tras un informe crítico de la OEA sobre la transparencia de la primera ronda de los comicios en los que había sido reelegido por cuarta vez consecutiva