El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, propuso este viernes un diálogo directo a los indígenas que protestan contra sus ajustes económicos, ante el recrudecimiento de los enfrentamientos en Quito.

“Es indispensable frenar la violencia. Hay que encontrar soluciones para los temas del país”, declaró Moreno en una breve mensaje por radio y televisión.

El mandatario planteó un encuentro cara a cara con los dirigentes de la protesta que completa diez días, y que se intensificó con nuevos choques en la agobiada capital ecuatoriana.

“Hago un llamado a los dirigentes a dialogar directamente conmigo”, enfatizó, añadiendo que está dispuesto a conversar sobre los ajustes pactados con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que encarecieron los combustibles.

“El país debe recuperar la calma; que el país sepa que tenemos la voluntad del diálogo, pues aquí está la mía”, sostuvo.

El jueves la Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie) canceló los contactos que a instancias de la ONU y la Iglesia Católica pretendían acercar posiciones con el gobierno, en busca de una salida a la crisis que desataron las reformas acordadas con el FMI a cambio de millonarios préstamos.

Además del fin de subsidios, las medidas prevén recortar derechos a empleados públicos. La Conaie exige que los ajustes sean derogados.

Moreno, que días antes se mostró confiado en un “pronto” arreglo, sigue la crisis desde el puerto de Guayaquil, adonde trasladó la sede de gobierno después de declarar el estado de excepción y enviar las Fuerzas Armadas a contener las protestas.