Los bomberos brasileños trabajan este sábado en cuatro áreas donde podría haber sobrevivientes de la ruptura de un dique minero en el estado de Minas Gerais (sureste), que hasta el momento dejó 9 muertos y 354 desaparecidos.

“Hay cuatro puntos en los que estamos trabajando con la expectativa de encontrar posibles víctimas vivas”, informó el comandante de los bomberos de Minas Gerais, el coronel Edgard Estevo.

Las búsquedas se centran en una comunidad, un edificio, un autobús y una locomotora.

La catástrofe ocurrió cerca de las 13:00 locales (15H00 GMT) del viernes en el municipio de Brumadinho, a 60 kilómetros de Belo Horizonte, sepultando buena parte de las instalaciones del complejo Córrego do Feijão, perteneciente a Vale, una empresa gigante del sector minero.

El gobernador del estado, Romeu Zema, dijo el viernes por la noche que las chances de rescatar sobrevivientes eran “mínimas”.

Estevo acotó que unos 140 efectivos trabajarán “ininterrumpidamente” buscando sobrevivientes y recuperando los cuerpos sin vida, con lo que las labores “se prolongarán durante semanas para que podamos dar noticias a todas las familias de los desaparecidos”.

El coronel Estevo aumentó de 300 a 354 la cifra de los desaparecidos.