La oposición boliviana intenta este martes inhabilitar la postulación del presidente Evo Morales a un cuarto mandato sucesivo hasta 2025, en el último día de impugnación de candidatos a las elecciones de 2019 ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE).

Un polémico reglamento del TSE limita únicamente a los militantes para impugnar al candidato de su partido e impedir su participación en las primarias de enero próximo, paso previo a las elecciones generales de octubre de 2019.

Aprovechando que fue inscrito erróneamente en el oficialista Movimiento Al Socialismo (MAS) por un fallo en sus registros, según su versión, el diputado opositor indígena, Rafael Quispe, presentó este martes la primera “impugnación a la candidatura ‘trucha’ (fraudulenta) de Morales”.

“Sigo en los registros del MAS, por tanto esto me habilita para hacer la impugnación”, sostuvo Quispe, disidente del MAS.

El tribunal electoral hará conocer las listas depuradas de candidatos el próximo 25 de enero, dos días antes de las primarias partidarias.

Además Quispe entregó “una acción de revocatoria” del fallo del TSE que habilitó a Morales para una nueva postulación.

Un militante de la opositora Unidad Nacional, que se inscribió en el MAS únicamente para impugnar a Morales, también registró su objeción al tribunal electoral.

El expresidente Carlos Mesa, principal rival de Morales en los comicios de 2019 según las encuestas de medios, pidió además en una carta al TSE que “anule la inconstitucional habilitación” de la candidatura del mandatario.

La habilitación del gobernante “está jurídicamente viciada de nulidad absoluta”, señaló Mesa en la carta.

En la misma línea, el candidato presidencial de derechas Óscar Ortiz, espera recolectar 300 mil firmas “para la inhabilitación, para que se sanee la democracia y se limpien las elecciones”.

Según el diputado opositor Wilson Santamaría, si el TSE no da luz verde “a la impugnación y a la acción (de revocatoria), acudiremos a la vía penal y agotaremos todos los mecanismos que la ley nos permite para defender la soberanía popular”.

Morales perdió en 2016 un referendo para su reelección, pero logró a fines de 2017 que el Tribunal Constitucional autorice su candidatura para el período 2020-2025, arguyendo que postular es su derecho humano.