Este jueves la Fiscalía anunció que autoridades venezolanas detuvieron al presidente y otros diez directivos de Banesco -uno de los principales bancos del país- por supuesta complicidad en operaciones especulativas contra la moneda local.

Óscar Doval, presidente ejecutivo, fue arrestado tras declarar el miércoles ante la Dirección de Contrainteligencia Militar (Dgcim), que lo había citado junto con otros funcionarios de la entidad financiera, con presencia en Estados Unidos, Panamá, República Dominicana y España.

Además de Doval fueron arrestados un consultor jurídico, cuatro vicepresidentes, un director, dos gerentes y dos oficiales de servicio, precisó ante la prensa el fiscal general, Tarek William Saab.

Saab aseguró que son sospechosos de facilitar o encubrir “ataques” contra el bolívar mediante la salida de papel moneda hacia otros países y la especulación con el precio del dólar en el mercado negro.

“El objetivo final (de esas acciones) ha sido destruir la moneda”, aseguró el fiscal, indicando que una inspección en el terreno determinó múltiples “omisiones en la prevención y monitoreo contra la legitimación de capitales“.

El viaje de Escotet

El presidente de Banesco Grupo Financiero Internacional, Juan Carlos Escotet, anunció este jueves que viajará desde Portugal a Venezuela a “socorrer” a sus compañeros en este “injusto y duro trance”.

“Hemos cumplido a cabalidad con toda la normativa (…) Vamos a recurrir a todas las instancias necesarias para que el problema se acabe y sean puestos en libertad como merecen”, señaló en un video publicado en la red Twitter.

Escotet consideró que el caso se ha tratado de forma “desproporcionada” y se comprometió a reforzar los controles para impedir cualquier ilícito.

“No es admisible que se exponga a nuestra institución, que tiene un historial de buenas prácticas (…), de la forma en que se ha expuesto. Nadie nos informó de esa investigación”, añadió.

Las detenciones forman parte de la operación “Manos de papel”, desplegada a mediados de abril contra presuntas mafias cambiarias y que deja como resultado 134 arrestos y 1.380 cuentas congeladas, 1.000 de ellas de Banesco. También fueron bloqueadas tres casas de cambio virtuales.

El gobierno del presidente Nicolás Maduro sostiene que esas redes son culpables del hundimiento del bolívar, mediante la fijación de tasas del “dólar negro” que multiplican hasta por 12 la cotización oficial.

El mercado paralelo ha florecido a la par del estricto control de cambios vigente, a través del cual el Ejecutivo monopoliza las divisas desde 2003.

Ante la caída de la renta petrolera, el gobierno prácticamente congeló la entrega de dólares al sector privado, que debe recurrir al mercado negro para importar productos y materias primas, lo cual dispara el costo de vida.

Según el FMI, la hiperinflación trepará este año por encima de 13.800%.

El fiscal subrayó que la meta es “desmontar todo un sistema financiero paralelo“, con conexiones en Colombia y Panamá, y tranquilizó a los ahorristas señalando que la pesquisa no afectará sus depósitos.