El nuevo gabinete ministerial de Perú inicia formalmente este jueves su gestión, con el desafío de reactivar la economía y superar la confrontación política, tras recibir un voto de confianza del Congreso, tal como lo exige la ley.

En una votación sin sorpresas efectuada a la medianoche del miércoles, el Congreso -dominado por la oposición fujimorista (derecha populista)- aprobó la designación del gabinete encabezado por el primer ministro César Villanueva por 94 votos a favor, 19 en contra y dos abstenciones.

Villanueva es el jefe de gabinete designado por el nuevo presidente peruano Martín Vizcarra, que asumió el poder el 23 de marzo tras la renuncia de Pedro Pablo Kuczynski, envuelto en denuncias de corrupción.

“Si tienen dudas, déjennos demostrar que se puede. Por eso, presidente, con mucha firmeza, con mucha convicción, con mucha pasión, les pido el voto de confianza. Confíen, aunque no nos acompañen”, dijo Villanueva ante el Congreso antes de la votación, tras un debate que se prolongó por 12 horas.

“Nuestro primer objetivo es mejorar la calidad de vida de los peruanos, nuestra economía se ha desacelerado y está por debajo del nivel de crecimiento que podemos tener”, advirtió Villanueva sobre la política general del gobierno y las principales medidas de su gestión.

El jefe del Gabinete, que juró el cargo el 2 de abril, propuso al Congreso una alianza para acabar con la confrontación que marcó la relación entre el parlamento y Kuczynski.

“No podemos seguir en la confrontación, el Congreso necesita ser un aliado estratégico para operar las leyes que el país necesita”, afirmó Villanueva.

La gestión de Kuczynski duró 20 meses antes de renunciar arrastrado por un escándalo de corrupción en medio de una investigación del Congreso -impulsada por sus adversarios fujimoristas- por sus vínculos con la empresa brasileña Odebrecht.

El flamante jefe de gabinete fue quien impulsó el pedido de destitución contra Kuczynski. Villanueva es un legislador del partido Alianza para el Progreso (derecha moderada).

Vizcarra ha tendido puentes hacia el poderoso partido Fuerza Popular, que lidera Keiko Fujimori, hija del expresidente Alberto Fujimori (1990-2000).

Villanueva reivindicó el pragmatismo y exhortó acabar con la división que prevalece entre fujimoristas y antifujimoristas para poder gobernar sin problemas.

Villanueva, de 71 años, reemplazó a Mercedes Aráoz, congresista del partido de derecha de Kuczynski.