Ecuador convocó de urgencia el miércoles a su embajador ante la OEA tras la “intromisión” de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) al cuestionar de manera “espuria” una medida aprobada el domingo en referendo.

El gobierno de Lenín Moreno llamó a consultas a su representante ante la Organización de Estados Americanos (OEA), José Valencia, luego de que la CIDH pidiera mantener sin cambios un ente de control, cuya reestructuración fue decidida en las urnas.

El mandatario se reunió con los titulares de varias funciones estatales como el Congreso y la máxima Corte de Justicia para examinar la posición de la CIDH, a la que calificó de “espuria”.

Insistió en que Quito acudirá a instancias del derecho internacional para “rechazar esta insolente intromisión en nuestro sistema democrático”.

Los ecuatorianos aprobaron el domingo por 63% de los sufragios reestructurar el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS), lo cual supone destituir a los actuales miembros y crear un consejo transitorio.

Sin embargo, la CIDH pidió el martes a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) que dicte medidas provisionales para evitar la salida de los miembros de ese ente, aduciendo que esto puede “generar riesgos en la efectividad del Estado democrático de derecho”.

El CPCCS, creado por el expresidente Rafael Correa, se encarga de designar autoridades electorales y de control como fiscal, contralor y procurador del Estado.

El llamado al embajador Valencia se debe al “accionar incomprensible, poco ético y contrario a procedimientos legales” de la CIDH, al pedir medidas provisionales en relación a un referendo en el que el pueblo mostró su mayoritario respaldo a las medidas impulsadas por Moreno, dijo la cancillería en un comunicado.

La CIDH y la Corte IDH forman parte del sistema interamericano de derechos humanos que opera en el seno de la OEA.

“Haremos respetar mandato”

Moreno, promotor del referendo que también eliminó la reelección presidencial indefinida, otro legado de Correa, expresó telefónicamente su malestar al secretario general de la OEA, Luis Almagro.

“Le he manifestado con claridad que así como somos respetuosos de los organismos internacionales, haremos respetar el mandato popular libremente expresado en las urnas, en un proceso democrático y fielmente apegado a nuestra Constitución”, contó Moreno en Twitter.

Almagro respondió en la misma red: “Hemos felicitado al presidente Lenín Moreno por el triunfo electoral, y por el compromiso democrático demostrado por el pueblo e instituciones de Ecuador. Los instrumentos interamericanos están al servicio justamente de la democracia y los pueblos”.

Según la CIDH, el referendo “no contó con control constitucional previo”. La comisión también recordó que los miembros del CPCCS para el periodo 2015-2020 “sólo pueden ser destituidos” por el Congreso mediante juicio político.

Ahora la Corte IDH deberá otorgar o rechazar medidas cautelares, que en caso de ser dictadas deben ser cumplidas por los Estados. Una delegación ecuatoriana, liderada por la canciller María Fernanda Espinosa, viajará este jueves a San José para reunirse con representantes de ese órgano.

La decisión de la CIDH fue cuestionada por expertos en derechos humanos vinculados al sistema interamericano.

“Esta decisión confirma que a la CIDH le falta sentido común y discernimiento jurídico en el manejo de las medidas cautelares y solicitudes de medidas provisionales”, escribió en Twitter el brasileño Daniel Cerqueira, un abogado que trabajó para la CIDH de 2006 a 2014.

“Esta decisión es indefendible, incluso para quienes servimos para la Comisión en el pasado”, tuiteó a su vez la abogada ecuatoriana Daniela Salazar.

Vergüenza y ridículo

Correa, que tras el referendo quedó sin opciones de recuperar el poder, insistió en que el referendo es “inconstitucional”.

“¡Qué rápido que el tiempo nos da la razón! La brutal inconstitucionalidad de la Consulta ya está en la Corte Interamericana. Culpables tendrán que asumir sus responsabilidades”, dijo el exgobernante por Twitter.

Y consideró que “el comunicado de cancillería defendiendo lo indefendible causa vergüenza ajena, y nos hace quedar en ridículo ante el mundo. No da una sola razón”.

Correa había pedido en diciembre a la OEA activar la aplicación de la Carta Democrática Interamericana en virtud de la “grave alteración al orden constitucional”
que según él llevaba a cabo Moreno al impulsar el referendo.

El exmandatario, que dejó el poder en mayo pasado tras gobernar Ecuador entre 2007 y 2017, mantiene una agria disputa con Moreno, quien fue su vicepresidente.

Según Correa, los funcionarios nombrados a “dedo” por Moreno buscarán implicarlo en casos de corrupción y sepultar por completo su obra de gobierno.