El Partido de los Trabajadores (PT) de Brasil organizó una campaña de movilizaciones de cara al juicio de segunda instancia que el 24 de enero podría confirmar la condena a casi diez años de cárcel del expresiddente Luiz Inácio Lula da Silva.

Los actos de protesta comenzarán el 13 de enero, bautizado como Día Nacional de Movilización, reseñó la directiva del partido este jueves en una nota oficial.

Un tribunal federal de Porto Alegre (sur) juzgará el recurso del expresidente, sentenciado en julio pasado a nueve años y medio de cárcel por corrupción pasiva y lavado de dinero.

La causa se refiere a la supuesta obtención de un apartamento en el balneario de Guarujá en Sao Paulo, que le habría ofrecido la constructora OAS a cambio de contratos en la estatal Petrobras.

El ícono de la izquierda latinoamericana, que aspira a candidatearse para las presidenciales de 2018, niega las acusaciones y asegura que son parte de “un pacto diabólico” para impedirle regresar al poder.

“Cada sede del PT, cada casa, se debe transformar en un comité de defensa de la democracia”, dijo Alexandre Padilha, vicepresidente del partido, indicó un comunicado del grupo político.

El PT salió del poder en 2016, con el impeachment de la presidenta Dilma Rousseff, acusada de manipular las cuentas públicas.

En el marco de esa campaña nacional, el Movimiento de trabajadores rurales Sin Tierra (MST) instalará el 20 de enero un campamento en Porto Alegre, a donde se espera la llegada de caravanas y seguidores del exlíder sindical y del PT.

El 22 de enero está previsto un debate público con juristas brasileños y extranjeros para “demostrar las numerosas fallas e irregularidades del proceso” contra el exmandatario, indica el comunicado, sin precisar el lugar del encuentro.

El 23, Dilma Rousseff liderará en Porto Alegre un acto con mujeres del PT. Y esa noche comenzará una vigilia a la espera del juicio.