Un Tribunal argentino sentenció este lunes a cuatro responsables de crímenes de lesa humanidad cometidos en el centro de detención clandestina Automotores Orletti, un viejo taller mecánico por donde pasaron cientos de secuestrados bajo la ejecución del Plan Cóndor durante los años 1970 y 1980.

Las penas son de 6 años de prisión para los policías federales Rolando Nerone y Oscar Gutiérrez, 16 años para el exagente de inteligencia César Enciso y 25 años para José Ferrer, también policía federal, anunció el Tribunal en lo Criminal Federal 1 en el juicio oral y público.

Este centro de detención clandestina estuvo bajo control de la disuelta Central de Inteligencia del Estado (SIDE) en coordinación con los ejércitos argentino y uruguayo.

A diferencia de otros condenados por varias acusaciones en su contra por crímenes de detenciones arbitrarias, torturas y desapariciones forzadas que implicaron al centro de detención Orletti, los cuatro acusados de este lunes fueron llevados a juicio por primera vez.

Se solicitaba una pena de prisión perpetua para Nerone, Gutiérrez y Ferrer, en tanto se pedía una condena de 24 años para Enciso.