El Partido Comunista Colombiano (PCC) y la guerrilla FARC, cuyos miembros están en transición a la vida civil, dijeron este jueves a la AFP que buscarán aliarse para las elecciones presidenciales de 2018 con otros sectores del país partidarios del acuerdo de paz.

En el marco de su XXII congreso inaugurado este jueves, el PCC desarrollará un programa de reformas, basado en el apoyo al pacto de paz entre el gobierno y las FARC que actualmente se implementa, explicó el presidente del partido, Jaime Caycedo Turriago.

Se buscará “un acuerdo para que haya un sola candidatura defendiendo ese (…) proyecto” de paz, agregó en la ceremonia inaugural, a la cual asistió parte de la cúpula de las FARC.

Al ser consultado sobre las perspectivas de cara a las presidenciales de 2018, el comandante guerrillero Carlos Antonio Lozada, indicó que la prioridad de las FARC es “la necesidad de la unidad de todos los sectores que estamos buscando que el futuro de nuestro país sea la paz y no la guerra”.

Las FARC, la principal guerrilla del país y que hace tres semanas concluyó su proceso de desarme, anunció meses atrás que apoyarían a un gobierno de coalición que garantice el cumplimiento del acuerdo de paz.

En agosto, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) prevén realizar un congreso para establecer su estrategia política y definirse como movimiento o partido rumbo a los comicios legislativos y presidenciales del próximo año.

El miembro de la cúpula de las FARC, Ricardo Téllez (nombre de guerra), expresó a su vez que están esperando “todos ansiosos el desarrollo (…) fundacional del nuevo partido o movimiento político” para trabajar “con todo el mundo”.

“Nosotros no tenemos en este momento una candidatura (…) pensamos que hay suficientes candidatos y candidatas, lo que necesitamos es que haya un piso común de entendimiento”, añadió de su lado Turriago durante el congreso, que concluirá el domingo.

Agregó que “no hay ningún impedimento que niegue la posibilidad de que las fuerzas de la izquierda puedan unirse e incluso integrarse en un sentido de alianza con ese nuevo partido de las FARC”.

El acuerdo de paz garantiza a las FARC un mínimo de diez escaños en el Congreso durante un periodo legislativo.

Por años, el PCC fue señalado de ser cercano a las FARC, por lo que sus miembros denunciaron persecución estatal y de paramilitares.

El pacto de paz busca poner fin a 53 años de conflicto interno, que ha enfrentado a guerrillas, paramilitares y fuerzas del Estado, dejando más de 260.000 muertos y 60.000 desaparecidos.