Al menos nueve personas fallecieron y unas 33 resultaron heridas, tras despistarse ayer domingo un bus de la empresa turística Green Bus que bajaba de un cerro en el distrito limeño del Rímac, considerado un lugar de turismo en la capital de Perú.

En la lista de fallecidos se encuentran dos chilenos, identificados como Johana del Pilar Soto Cáceres y Osvaldo Enrique Encinas Fernández, de acuerdo a la información entregada por la Fiscalía de ese país al portal El Popular.

Entre los heridos también se registran ciudadanos de nuestro país, donde figuran los hijos de la fallecida, Franco Osorio Soto y Josefa Osorio Soto: esta última ha sido asistida por el Ministerio de la Mujer de Perú, el cual reportó que ya se comunicó con el padre de ambos jóvenes para que viaje de urgencia a Lima.

Junto a ello también se confirmó el fallecimiento de Oswaldo Enrique Encina Fernández. Eso sí, según el diario El Comercio, las autoridades indicaron que uno de los cuerpos está como NN debido a que no portaba ningún documento.

En tanto, aún falta determinar las identidades de cuatro personas más, lo que se confirmará con el reconocimiento de los familiares y las huellas dactilares.

El comandante de los Bomberos, Lewis Mejía, indicó que el bus bajaba del cerro San Cristóbal, un punto turístico a donde las personas acuden los domingos para ver desde la cima toda la ciudad. En ese lugar hay una cruz de unos viente metros donde los turistas se toman fotos.

Bus accidentado en Lima.
elcomercio.pe

De acuerdo a RPP Noticias, el registro de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) reveló que el bus de placa ACE-920 tenía cinco infracciones: cuatro estaban pendientes de pago y una tenía medida cautelar.

Si bien la prensa reportó que en un principio la empresa propietaria del bus cerró su cuenta en Facebook, más tarde fue reabierta. Por esa vía entregó condolencias a las familias afectadas y aseguró que “nuestro seguro está velando por las personas heridas y estamos realizando los trámites correspondientes para los cuerpos que se encuentran en la morgue de Lima”.

Eso sí, más tarde optaron por borrar dicha publicación.