Bolivia denunció este martes que Chile “vulneró” disposiciones de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) al revelar los alcances de su memoria sobre el afluente fronterizo Silala, y reiteró que presentará en 2018 una contrademanda por este mismo caso.

El gobierno boliviano “rechaza categóricamente las declaraciones vertidas por la presidenta de la República de Chile, Michelle Bachelet, y su canciller Heraldo Muñoz, que no sólo vulneran las disposiciones reglamentarias de la Corte, al revelar de forma interesada e inexacta los alcances de la disputa, sino que provocan un debate público”, afirmó Evo Morales en una declaración de prensa.

La reacción del gobernante surgió, un día después de que Bachelet y Muñoz anunciaran que se presentó la memoria en la CIJ, reclamando el Silala es un río internacional.

Muñoz precisó que la memoria “incluye argumentos jurídicos y científicos que confirman una realidad muy simple: el río Silala atraviesa la frontera entre Chile y Bolivia de manera absolutamente natural, producto de una pendiente y la fuerza de gravedad”.

Por lo tanto -según Chile- es un “río internacional” de acuerdo al derecho y una quebrada (paso por un cerro) “desde hace 8.400 años”.

Morales replicó que el “reglamento de la Corte prevé que la memoria presentada por un estado tiene carácter reservado, hasta que la misma disponga su publicidad” y que por lo tanto “el gobierno de Bolivia no hará referencia alguna a su contenido”.

Al mismo tiempo, el mandatario altiplánico rechazó declaraciones de Muñoz, respecto a que las autoridades bolivianas mintieron a sus connacionales en torno al cauce del Silala.

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“Bolivia responderá debidamente a la demanda chilena por el manantial Silala, preservaremos el agua como fuente de vida (…) Rechazamos las declaraciones de las autoridades chilenas ya que Bolivia está con la verdad #ElSilalaEsDeBolivia”, tuiteó Morales.

La Paz argumenta que el Silala es un manantial que nace en bofedales y agua subterránea en su territorio, canalizado artificialmente hacia Chile. Por esta razón, según Morales, “la demanda es artificial, como los ductos que desvían el agua”.

El gobierno boliviano y su equipo internacional analizarán la memoria presentada por Chile y la contrastarán con toda la documentación histórica y geológica que posee su país sobre el Silala.

Esos antecedentes -acotó- servirán para presentar “la respectiva contramemoria y contrademanda de Bolivia hasta el próximo 3 de julio de 2018”. Morales había anticipado en 2016 que elaboraría una contrademanda al proceso iniciado por Chile.