La justicia en Buenos Aires condenó por primera vez a un conductor de la empresa multinacional de transporte Uber por ejercicio ilegal de la actividad, informó este martes el Ministerio Público Fiscal.

La pena consiste en dos días de arresto e inhabilitación de manejar por dos meses en suspenso, para un chofer que se acogió a la modalidad de juicio abreviado.

El acuerdo fue firmado el lunes por el imputado y el fiscal de Cámara Martín Lapadú y homologado por un juzgado penal de la capital argentina.

“Con esta primera condena que sanciona a penas de arresto e inhabilitación para conducir queda afirmada en una sentencia condenatoria la ilicitud de las conductas de los choferes de Uber“, afirmó el fiscal Lapadú, en un comunicado publicado por el Ministerio Público Fiscal en su portal de Facebook.

Al imputado, cuyo nombre no fue divulgado, le hicieron un acta “por transporte ilegal” cuando manejaba un vehículo particular el 22 de diciembre de 2016, ofreciendo el servicio de socio conductor de Uber.

Uber, que desembarcó en Argentina en abril del año pasado, lleva un año de actividades pese a que no cuenta con autorización de la alcaldía.

En diciembre pasado, Lapadú informó que se habían identificado 3.978 conductores de Uber y advirtió que iría tras ellos por violar las normas de la ciudad.

El fiscal había pedido la detención de los directivos de la empresa, pero esta medida fue rechazada por la jueza a cargo.

En medio de la puja judicial, una cámara de apelaciones ratificó en noviembre un fallo favorable a la empresa al entender que no comete delito.

Desde su llegada se desató una pugna con los conductores de taxis que pagan impuestos y mantienen sus unidades bajo inspección y control comunal, a diferencia de los vehículos no habilitados para el transporte de pasajeros que usa la corporación.

La capital argentina cuenta con unos 38.000 choferes de taxímetros registrados. Buenos Aires es una de las megalópolis de Latinoamérica, con más de 13 millones de habitantes si se incluye la periferia.