El exgobernador del norteño estado de Tamaulipas entre 1999 y 2005, Tomás Yarrington, acusado de lavado de dinero del narcotráfico y requerido por Estados Unidos, fue detenido en Italia tras ser buscado desde 2012, informó este domingo la Procuraduría General mexicana.
“Se logró la ubicación y detención del señor Tomás Jesús Yarrington Ruvalcaba en Italia” este domingo, informó la Fiscalía en un comunicado, precisando que el político deberá responder por los delitos “delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita“.
La Fiscalía explicó que la detención de Yarrington fue posible tras emitirse una ficha Roja de Interpol para la localización y captura del exgobernante, quien militaba en el oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI), del que fue expulsado en 2016.
La Procuraduría General ofreció en diciembre pasado una recompensa de 527.595.000 pesos chilenos por la captura de Yarrington, quien como gobernador de Tamaulipas habría establecido nexos con poderosos cárteles que actúan en ese estado fronterizo con Estados Unidos.
La fiscalía mexicana no detalló en qué localidad italiana fue detenido, pero la prensa local señala que habría sido en Florencia.
Tras concluir su mandato como gobernador, Yarrington tuvo aspiraciones presidenciales y fue precandidato del PRI para la elección de 2006, pero perdió en la contienda interna de su entonces partido.
Acusado en EEUU
Las investigaciones en su contra comenzaron en México en 2012 y al año siguiente el FBI estadounidense inició una indagatoria sobre supuestos pagos que habría recibido del cártel del Golfo, que opera en Tamaulipas, para permitirles actuar a “gran escala”.
El FBI aclaró que una corte del sur del estado de Texas (fronterizo con México) le acusa de lavado de dinero, conspiración para cometer fraude y violación de la ley en materia de sustancias prohibidas, entre otros delitos.
Dicha corte también lo investiga por su presunta relación con el tráfico a Estados Unidos de “enormes cantidades de cocaína” de 2007 a 2009, cuando ya no era gobernador, desde el Puerto de Veracruz, en el Golfo de México, precisó el FBI.
Junto con Yarrington es investigado tanto en México como en Estados Unidos Fernando Cano, propietario de una constructora y quien habría sido uno de sus principales operadores en el lavado de dinero del narcotráfico.
Cano fue detenido en febrero pasado en el norteño estado de Nuevo León, pero consiguió un recurso de amparo para llevar su proceso en libertad.
Otros exgobernadores mexicanos han sido acusados de tener nexos con el narcotráfico, entre ellos Mario Villanueva, quien dirigió el turístico estado de Quintana Roo de 1993 a 1999: fue detenido en 2001 y en 2010 fue extraditado a Estados Unidos, donde estuvo en prisión seis años y siete meses.
Tras ser liberado, fue deportado a México en enero para ser nuevamente encarcelado, toda vez que tiene pendiente una condena de más de 20 años de prisión.
La justicia mexicana, con la colaboración de Interpol, busca a otros dos exgobernadores prófugos acusados de corrupción: Javier Duarte, de Veracruz, y César Duarte, de Chihuahua.
