La expresidenta argentina Cristina Fernández recibió este martes otro revés judicial al ser inculpada por supuesta asociación ilícita y lavado de activos en una causa que incluye a sus dos hijos, informaron fuentes judiciales.

El juez claudio Bonadio que lleva esta causa ordenó además el embargo por 130 millones de pesos argentinos (poco más de 5.600 millones de pesos chilenos) y prohibió la salida del país de todos los procesados, entre los que se incluyen además de Kirchner y sus hijos Máximo y Florencia, dos empresarios, precisó el Centro de Información Judicial (CIJ).

El magistrado también prohibió la salida del país de todos los procesados, entre los que se incluyen además de Kirchner y sus hijos Máximo y Florencia, dos empresarios, precisó el Centro de Información Judicial (CIJ).

Según la resolución, la exmandataria trasandina, de 64 años, fue procesada como “autora penalmente responsable” de los delitos de “asociación ilícita en calidad de jefe en forma real con el delito de lavado de activos de origen ilícito agravado por su habitualidad” y de negociaciones incompatibles por ser funcionaria.

Florencia y Máximo Kirchner fueron procesados por formar parte de una “asociación ilícita” y los empresarios Cristóbal López, Lázaro Báez, Fabián De Sousa y Osvaldo Sanfelice fueron inculpados en calidad de “organizadores”.

Protagonista de una saga judicial con varias causas y denuncias en su contra, la expresidenta afrontará su primer juicio oral por supuesto perjuicio al Estado en un polémico caso de operaciones cambiarias al final de su mandato, también a cargo del juez Bonadio.

Son cuatro las causas que pesan sobre Fernández, la mayoría por supuestos casos de corrupción, sin embargo “la del dólar futuro es la más favorable a ella”, explicó a mediados de marzo a la AFP el analista político Rosendo Fraga.

La propia expresidenta había solicitado al juez que lleva esta causa, Claudio Bonadío, elevar el caso a juicio oral. El magistrado, que con Fernández son enemigos declarados, no fijó la fecha de este proceso conocido como “dólar futuro”.