La Corte Suprema de Justicia (CSJ) de El Salvador ordenó este viernes abrir un juicio por presunto enriquecimiento ilícito contra Elmer Charlaix, quien fuera secretario privado del expresidente Elías Antonio Saca (2004-2009).

“La Corte Suprema de Justicia en pleno estableció que existen indicios suficientes de enriquecimiento del exsecretario privado de la presidencia de la república, señor Elmer Roberto Charlaix, y ordena se inicie el respectivo juicio (…)”, consignó el tribunal en un comunicado.

La CSJ se basó en un informe de la Sección de Probidad que “estableció la existencia de irregularidades e indicios que presumen enriquecimiento ilícito, debido al hallazgo de un monto no justificado de 18.767.445″ de dólares en el patrimonio del exfuncionario, resume el comunicado.

En su investigación, la CSJ estableció que de cuentas bancarias de la Presidencia se libraron cheques a nombre de personas naturales y jurídicas, “los cuales en su mayoría eran depositados en cuentas personales del señor Charlaix”.

El juicio, que deberá ventilarse en la Cámara Primero de lo Civil, incluye además la inmovilización de cuentas bancarias del imputado, realizar un inventario de bienes inmuebles, y la restricción de transferencia de propiedad de una serie de acciones en distintas sociedades.

En su defensa, Charlaix alegó -según la CSJ- que los depósitos en las cuentas particulares provenientes de fondos públicos se realizaron al amparo de un acuerdo emitido por Saca en el que lo nombrada “colaborador del presidente de la república, para el manejo de los gastos reservados y secretos” que abarcan todas las actividades de la inteligencia del Estado.

La CSJ no encontró copia del acuerdo de Saca en la Presidencia, ni su publicación en el diario oficial del país.

El exsecretario apeló a su derecho de “guardar secreto” de los colaboradores designados para el manejo de los gastos reservados porque el uso de los fondos “se constituyen como secreto de Estado y que sus actuaciones fueron constitucionalmente válidas”.

El sistema judicial salvadoreño, mantiene abiertos juicios por presunto enriquecimiento ilícito contra el expresidente Saca por poco más de 4 millones de dólares, así como contra el expresidente Mauricio Funes (2009-2014), por 728.000 dólares.