En un comunicado, los cancilleres de Argentina, Brasil, Chile, México, Paraguay y Perú manifestaron su rechazo y preocupación por la decisión del Consejo Nacional Electoral de Venezuela (CNE) que, entre otros aspectos, buscaría postergar el referendo revocatorio solicitado por la mayoría de los venezolanos.

En este sentido, las autoridades dejaron claro que el método determinado para la recolección del 20 por ciento del padrón electoral tiene un efecto intencional que busca postergar la salida del presidente Nicolás Maduro por la vía del referendo revocatorio, aplazando así la fecha hasta el 2017.

De ser este el escenario y darse la consulta popular en 2017, según la constitución venezolana, si el presidente Maduro es revocado asumiría su cargo el vicepresidente de la nación, el que puede ser nombrado hasta un día antes del referendo, y deberá cumplir lo que restase del periodo presidencial, hasta el 2019.

Actualmente, Venezuela se mantiene sumida en una crisis política, social y económica. La oposición de Maduro denuncia que el poder electoral esté al servicio del ejecutivo, así como el resto de los poderes, como el judicial, que ha sancionado cuatro leyes aprobadas por el congreso de mayoría opositora, y la declaró la suspensión de tres diputados.

En el mismo comunicado, los cancilleres Susana Malcorra (Argentina), José Serra (Brasil), Heraldo Muñoz (Chile), Claudia Ruiz Massieu (México), Eladio Loizaga (Paraguay) y Ricardo Luna (Perú) reiteraron su disposición por contribuir a la realización de un diálogo entre el Gobierno y los distintos actores políticos y sociales venezolanos que permita, a través del entendimiento mutuo, promover la estabilidad política, la recuperación económica y el pleno respeto a los derechos humanos.