Un juez federal argentino ordenó este jueves congelar las cuentas bancarias de la expresidenta Cristina Fernández por la causa en la que se investigan operaciones cambiarias del Banco Central durante su gobierno, caso que se ha denominado como “Dólar Futuro”.

El juez Claudio Bonadio, que acusa a Fernández de haber causado daño financiero al Banco Central por sus medidas contra la devaluación en 2015, ordenó congelar los fondos hasta que la expresidenta cubra un embargo por 15 millones de pesos argentinos (1,02 millón de dólares) que fue fijado al momento de su procesamiento.

Fernández “fue intimada precedentemente por el Oficial de Justicia ‘ad hoc’ de este Juzgado, manifestando no poseer ni bienes ni dinero para dar a embargo, DECRÉTASE LA INHIBICIÓN general de bienes respecto de la nombrada, hasta cubrir la suma de pesos QUINCE MILLONES ($15.000.000)“, escribió Bonadio en el documento publicado por el sitio web del Centro de Información Judicial.

EL juez agregó que “al momento de ser intimada a embargo (…) la encausada manifestó que no satisfaría el mismo, y que de acuerdo a la prueba reunida (…) la nombrada registra productos bancarios, financieros y valores en distintos bancos del país”.

La operatoria de futuros por la que Fernández y parte de su gabinete económico son investigados consiste en fijar un precio de la divisa a tres o cuatro meses, como inversión.

Si el tipo de cambio baja, el Banco Central gana dinero. Si se devalúa, el Banco pierde. Una de las primeras medidas de Macri fue liberar el tipo de cambio, y la devaluación llegó a 32%.

La exmandataria, que asistió a una audiencia de notificación el miércoles, repitió que este era “un caso de hostigamiento. Hacen un uso político de esta causa”, dijo la expresidenta.

Bonadio sostiene que cuando ella era presidenta impulsó en el Banco Central la venta de dólares a futuro a un precio bajo. Acusa que esa operación provocó fuertes pérdidas a la autoridad monetaria.

Fernández afirmó que los contratos a futuro “fueron firmados por CEO (directores de empresas) que después se convirtieron en funcionarios del gobierno (de Mauricio Macri). Devaluaron y le preguntaron a Bonadio si el banco les podía pagar los futuros. Les dijo que sí”.

La viuda de Néstor Kirchner también es investigada por presunto enriquecimiento ilícito, según una denuncia de la diputada socialdemócrata Margarita Stolbizer.

La legisladora acusó a Fernández de tenencia oculta de cinco millones de dólares en cajas de Seguridad en el Banco de Santa Cruz, de la provincia patagónica de donde proviene la familia Kirchner.

Este jueves el banco notificó, al igual que autoridades policiales, que “la familia Kirchner no tiene cajas de seguridad en esa entidad”.

“Es una falsa denuncia. Yo había convertido a pesos mis ahorros en 2012 para dar un mensaje a la sociedad. Pero ahora no confío en este gobierno y volví a comprar dólares con mis ahorros”, explicó Fernández el miércoles ante una decena de periodistas y cientos de seguidores que acudieron a respaldarla en las afueras de los tribunales de Buenos Aires.