A través de un escrito leído por el abogado y exministro José Eduardo Cardozo, la suspendida presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, entregó su declaración al comité de impugnación en el marco del impeachment que se sigue en su contra.
La mandataria afirmó que el caso por el que se le acusa es una “farsa jurídica y política”, afirmando que luchará por completar su mandato por respeto a sus electores, consignó O Globo.
“En nombre de esos votantes y en nombre de todo el pueblo de mi país, voy a luchar con todos los instrumentos legales disponibles para para ejercer mi mandato hasta el final” expresó en el documento, donde fustigó a quienes persiguen su destitución.
“Tarde o temprano van a sentir el terrible peso de la vergüenza, de vislumbrar su propio rostro en el espejo de la historia”.
Errores políticos
En su misiva, Dilma reconoció haber cometido errores políticos y personales. No obstante, descartó tajantemente haber utilizado fondos del erario brasileño para su beneficio. “Nunca se desvió un solo centavo de la propiedad pública para mi enriquecimiento personal o de terceros”, sostuvo.
Finalmente la mandataria dejó entrever que el hipotético término de su Gobierno representaría una “nueva ruptura democrática” y que su país debía demostrar al mundo que es capaz de construir instituciones sólidas, capaces de resistir a los contratiempos económicos y políticos.
“Debemos demostrar que sabemos honrar nuestra Constitución, la democracia y el Estado de Derecho, respetando el voto popular”, enfatizó.
