La Casa Blanca criticó el martes la “cobardía” del Senado de Estados Unidos por rechazar el día antes el endurecimiento de las leyes sobre las armas de fuego propuesto por los demócratas después de la matanza de 49 personas en Orlando.

“Lo que presenciamos ayer (lunes) por la noche en el Senado de Estados Unidos fue una vergonzosa demostración de cobardía”, dijo Josh Earnest, portavoz del presidente Barack Obama, en el programa “Morning Joe” de la cadena MSNBC.

No sé qué otro término usar“, agregó.

Las dos propuestas demócratas buscaban, por un lado, prohibir a las personas que figuran en la lista de vigilancia terrorista comprar armas de fuego, y por otro, extender a cualquier tipo de venta, incluyendo salones especializados, las comprobaciones de antecedentes penales y psiquiátricos antes de cualquier transacción.

Se trataba de propuestas de leyes de sentido común“, insistió Earnest. “Los cobardes son personas que hablan con un lenguaje muy duro, con la esperanza de que nadie les pida actuar realmente y hacer algo. Y eso es exactamente lo que los republicanos han hecho”, añadió.

“Ellos no quieren hacer nada porque le tienen miedo a la NRA”, la Asociación Nacional del Rifle, el poderoso lobby de las armas. “Es una vergüenza”.

Los demócratas se hacen pocas ilusiones sobre sus posibilidades de aprobar una reforma antes de las elecciones presidenciales y legislativas de principios de noviembre.

Su verdadero objetivo, en este momento, es hacer que el debate sobre las armas se vuelva un tema de campaña.

Tras una reunión el jueves en Orlando con las familias de las víctimas de la masacre en una discoteca, Obama consideró que el debate sobre las armas debe “cambiar” en Estados Unidos.

Aquellos que defienden un acceso fácil a fusiles de asalto deberían reunirse con estas familias“, afirmó el mandatario, llamando a los senadores a mostrar que están “a la altura” de las circunstancias.