Milán entró de lleno el sábado en su semana de la moda masculina con dos desfiles en los que además se presentaron algunas mujeres.
Llamados “co-ed”, del término en inglés para las escuelas mixtas (“coeducational”), los desfiles mixtos hicieron su aparición el año pasado en las capitales mundiales de la moda, lo que permitió que las grandes marcas de moda se ahorrarán importantes sumas de dinero al organizar un desfile menos.
En su desfile, con música del joven cantante estadounidense Austin Mahone, que interpretó varios de sus temas entre los modelos, Dolce&Gabbana presentó trajes de corte tradicional para los hombres.
Los modelos mostraron chaquetas ajustadas con estampados jacquard, que pueden tener efectos muarés con toques de rosa u oro.
Para la próxima temporada de invierno (en Europa), las chaquetas patchwork serán muy acolchadas y llegarán casi a los pies. Los pantalones cargo de estilo militar llegarán en cambio hasta los tobillos.
En medio de obras de arte
El italiano Antonio Marras propuso el sábado el desfile más original de la jornada, al combinar moda y arte.
Marras, que también es artista plástico y expone actualmente en Milán, escogió instalar sus modelos en medio de sus obras.
El espectador deambulaba así en medio del universo onírico del creador sardo, lleno de collages, dibujos, imágenes y objetos que el artista ha reunido en sus numerosos viajes.
Se podían ver modelos, tanto hombres como mujeres, interpretando a personajes o figuras mitológicas, y contando su historia mediante gestos y coreografías.
Considerado como el “más intelectual” de los estilistas italianos, Marras propone una colección donde la materia y la forma se entremezclan. Los modelos usaron parkas acolchadas y chaquetas de color caqui con mangas de estilo leopardo.
Por la mañana, Christian Pellizzari presentó también un desfile mixto, inspirado esta vez en el Hollywood de los años 1930.
Para su colección otoño-invierno 2017-2018, el joven diseñador se inspiró del estilo “Hollywood Regency”, una mezcla de kitsch y de comodidad, que decoraba las mansiones de las estrellas de cine de la época.
Pellizzari lo ha interpretado a su manera, dándole una base contemporánea y moderna y un toque de ironía. En el próximo invierno europeo, el hombre Pellizzari llevará camisas acolchadas y pantalones cargo con amplios volúmenes.
