Son muchos los productos de aseo e higiene que diariamente usamos para lucir mejor, pero que sin embargo tienen un gran potencial que no explotamos debido a ciertos errores que cometemos.

¿Sabías que no da lo mismo el lugar en el que guardaremos la navaja para afeitar? ¿O que te estás echando más espuma de afeitar de lo que crees? Aunque no lo creas estos “pequeños” detalles pueden tener consecuencias.

Cabe señalar que cerca de un 30% de la población puede llegar a sufrir una enfermedad dermatológica, razón por la que es aconsejable prestar atención a los productos que utilizamos en su cuidado.

Con el objetivo de sacar el mayor rendimiento posible a los diferentes artículos de cuidado personal, a continuación revisaremos 5 trucos que debieras considerar desde hoy mismo.

1- Usar menos espuma de afeitar

Una tendencia que se observa en la mayoría de los hombres es el del uso excesivo uso de espuma para afeitar. Tal como recoge el sitio especializado Men´s Health, lo aconsejable es usar sólo dos tercios de la cantidad normal que empleas. Dicho de otro modo, puedes intentar usar una dosis que no sea más grande que una moneda.

Una vez que tengas la espuma en tus manos, mézclala con agua para que se disuelva hasta crear una espuma aún más liviana. Esto permitirá que la navaja realice una afeitada más precisa ya que estará más cerca de tu piel.

2- Cuidado con las navajas para afeitar

Relacionado al primer punto, es muy importante saber donde guardarás las navajas para afeitar. Muchos se despreocupan de este detalle y las dejan boca abajo en alguna parte de la ducha o lavamanos, lo que es un error ya que esto sólo hará que se deterioren aún más rápido.

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Además, la humedad hará que múltiples bacterias puedan infectar el filo, los que durante el proceso de afeitado pueden llegar a tu piel. Para evitar esto, procura guardarlas boca arriba en un lugar seco, como por ejemplo un cajón.

3- No golpear las navajas

Luego de la afeitada es probable que golpees la navaja en el lavamanos para sacar los vellos que quedan enterrados. “Las navajas usadas de manera incorrecta duran máximo tres rasuradas”, asegura el doctor Joshua Zeichner, director de Investigación Clínica y Cosmética en Dermatología del Hospital Monte Sinaí, en Nueva York.

Es por esto que lo ideal es que no sigas con esta práctica ya que sólo hará que las hojas de la navaja se desalineen. Para evitar esto sólo usa agua caliente para sacar los vellos. LO que si puedes golpear suavemente es el mango para secarlo.

4- No dejar el perfume al sol

Probablemente no prestes mayor preocupación respecto al lugar en el que guardas tus colonias y perfumes, lo que puede ser un grave error ya que si se mantienen bajo excesiva luz y calor se deteriorará la fragancia y afectará al aroma.

Lo mejor es conservarlos en un lugar oscuro y seguro, como dentro de un closet. Dentro de un tiempo comprobarás que sus propiedades no se verán disminuidas.

5- Saber cuándo usar el desodorante

Si eres de los que ha tenido que correr de un lugar a otro durante el día, y para disimular el sudor recurres a los desodorantes, debes saber que esto puede empeorar la situación.

¿La razón? Aplicar el desodorante encima del sudor sólo hará que el olor aumente. En cambio, lo mejor es tomar una ducha y estar bien seco antes de aplicar este producto.

Diego del Ojo, profesor de la Universidad de Cádiz y director de la clínica Dermalaser s.XXI, comentó al periódico español El País: “El desodorante está diseñado para minimizar el olor de las axilas, no para reducir o eliminar la transpiración”.