El plantel del Porto FC celebró eufórico el penal fallado por Atlético, acción que le dio el paso a los octavos de final en la Champions

El Porto FC alcanzó de una manera muy particular su avance a los octavos de final de la Champions League, por el Grupo B. A primera hora había goleado por 4-0 a Club Brujas, en Bélgica.

El cuadro portugués dependía de lo que ocurriera en el duelo entre el Atlético de Madrid y el Bayer Leverkusen para abrochar, con un partido por jugar, su boleto a la fase final del máximo certamen continental.

En la capital española, el cuadro ‘colchonero’ se encontró con un penal en el último minuto, tras revisión en el VAR, cuando el árbitro ya había dado por concluido el encuentro. Con el marcador 2-2, Yannick Carrasco remató desde los 12 pasos y falló.

Si los de Simeone marcaban, el ‘Atleti’ todavía tenía chances de pasar a octavos. Finalmente, tras la pena máxima desperdiciada, el Porto terminó celebrando y de una forma bien singular.

El plantel luso vio en el avión el penal que falló Carrasco y celebró con euforia, en pleno vuelo, la clasificación a la ronda de 16 en la Champions. La locura se desató en pleno vuelo: emoción, gritos y abrazos.