Con el abrupto termino del Campeonato Nacional del año pasado a causa de las movilizaciones en el contexto del estallido social, varios jugadores debieron emigrar de sus equipos.

En Colo Colo no fue la excepción y entre los nombres que dejaron el Monumental estaba Iván Rossi, volante argentino que llegó proveniente de Huracán.

Con 26 años, el jugador debió volver a River Plate, club dueño de su pase. Sin embargo, en el ‘Millonario’ se encontró con un oscuro panorama y la dura competencia lo tienen en una delicada situación.

Marcelo Gallardo no lo tiene considerado por lo que debe entrenar en soledad y separado del plantel profesional. El volante se lamenta: “Es complicado no entrenar con el plantel. Uno va para estar bien físicamente y porque cobra un sueldo, pero llega un momento en el que te explota la cabeza”.

“Yo no pido hacer fútbol, pero por lo menos que me dejen estar trotando con mis compañeros”, lamentó el jugador que disputó ocho partidos en El Cacique.

Sobre su relación con el ‘Muñeco’ detalló a Radio Continental que “tengo buena relación con los chicos y el cuerpo técnico; y respeto la decisión de Marcelo. A mí me gustaría trabajar a la par del resto, pero estas son las normas”.

En la misma línea, recalcó que “tuvimos muchas charlas con Gallardo y siempre me fue de frente. Siempre me marcó que era un gran jugador pero que no rendía al nivel que él quería en los entrenamientos”.