Esta semana Cristiano Ronaldo dio una profunda entrevista a la televisión británica donde reveló detalles de sus inicios como futbolista.

El portugués rompió en llanto al recordar a su padre fallecido, lamentando que no pudiese verlo ganar alguno de sus títulos.

CR7 confesó además que cuando vivía en la pensión del Sporting de Lisboa, a sus 12 años, y no tenía dinero para comer, iba con otros niño a un Mc Donalds donde tres empleadas le regalaban hamburguesas gratis cuando le sobraban.

En ese sentido, Ronaldo reveló que le gustaría conocer a esas mujeres para invitarlas a comer a Lisboa y Turín. Y dos días después en la radio portuguesa Renascenca, apareció una de ellas, de nombre Paula Leca.

“Aparecían frente al comercio. Cuando había demasiadas hamburguesas, nuestro gerente nos daba permiso para dárselas. Uno de ellos era Cristiano Ronaldo, que resultó ser el más tímido. Así sucedió”, dijo.

“Todavía me estoy divirtiendo con esto que se supo. Yo le había dicho a mi hijo que era mentira, que su madre nunca podría haberle dado una hamburguesa a Cristiano Ronaldo. Mi marido sí lo sabía porque él iba a buscarme allí a veces. Es divertido volver atrás en el tiempo y él que muestre su humildad. Sobre la invitación a la cena, si llega, la gente sabrá que esto no es un invento. Estaré segura. Lo primero será agradecérselo y ya tendremos tiempo para recordar ese momento”, agregó.

La mujer entregó más detalles de las visitas del astro de la Juventus al local de comida rápida en Lisboa.

“Sólo teníamos una puerta principal y dos mesas. Aparecerían alrededor de las 11 de la noche para ver si teníamos sobras. Se permitía llevar a casa las sobras de hamburguesas y papas”, añadió.

“Luego comenzaron a comer bocadillos, pero las hamburguesas las llevaban adonde estaban alojados. Siempre tenían que esperar hasta el cierre, porque podría haber un cliente, con Ronaldo siempre detrás de los demás”, cerró.