La Copa de África de Naciones de Egipto (CAN-2019) conoce ya a los protagonistas de su gran final del viernes 19: Argelia y Senegal, con sus respectivas estrellas Riyad Mahrez y Sadio Mané, se disputarán el título continental tras sus victorias este domingo en semifinales.

Argelia se impuso en el descuento a Nigeria (2-1) gracias a un soberbio tanto de falta directa del propio Mahrez, mientras que Senegal derrotó por la mínima (1-0) a Túnez en la prórroga.

Será una final inédita en la historia del torneo, con un duelo que tiene un precedente muy cercano, en la fase de grupos de esta misma Copa de África, donde Argelia venció 1-0.

Tanto Mané como Mahrez tienen tres tantos en su cuenta particular a lo largo de esta CAN, pero Mahrez tuvo un papel mucho más determinante en semifinales.

El jugador argelino se convirtió en el héroe de su semifinal al transformar magistralmente en gol su lanzamiento de falta desde la frontal, cuando el cronómetro marcaba ya el 90+5 y todo el mundo se preparaba para la prórroga.

Mahrez había sido también protagonista en el primer gol de Argelia, en los 40 minutos, cuando una incursión suya por la banda derecha terminó con un balón al centro del área, donde el defensa William Troost-Ekong, en su intento de despejar, terminó metiendo el balón en su propia portería.

“Ha sido mi gol más importante con la selección. Mi sueño es ganar la Copa de África. Vamos a descansar y a concentrarnos, será otra batalla contra Senegal. Intentaremos ganarla”, se ilusionó Mahrez.

Unas horas antes, Senegal se había clasificado para la segunda final de su historia en la CAN con un 1-0 en la prórroga sobre Túnez.

El tanto de la victoria de los ‘Leones de Taranga’ llegó en forma de gol en contra de Dylan Bronn, en el minuto 101. Una falta colgada al área por Senegal fue despejada por el arquero tunecino, con la mala fortuna de que el balón rebotó en el hombro de Bronn y terminó alojado en la red de las ‘Águilas de Cartago’.

En los noventa minutos reglamentarios, cada uno de los equipos falló un penal.

El choque terminó en la prórroga, donde la fortuna, simbolizada en ese tanto de rebote que decidió el choque, acompañó a Senegal hasta la gran final.

Antes de la final del viernes, Nigeria y Túnez se disputarán el miércoles el tercer puesto.