Hace poco más de un año, el fútbol español se remeció con un escándalo protagonizado por un jugador del Villareal. El defensor portugés, Rubén Semedo, era puesto en prisión tras ser acusado de secuestro, robo con violencia y tenencia ilícita de armas entre otras cosas.

El Juzgado de Instrucción número 6 de Lliria lo condenó a cinco meses de prisión preventiva sin fianza, por lo que Semedo vio como sus sueños de triunfar en una de las ligas más importantes del mundo se iba apagando.

El tiempo ha pasado y pese a estar en libertad vigilada, el exjugador del Villareal fue autorizado para salir de España en el mercado invernal, por lo que ahora defiende los colores del Río Ave, cuadro de la primera división de su país, a la espera de que se efectúe el juicio.

Fue en dicho contexto, que Semedo se sinceró con el medio ‘A Bola’ y relató como fue su experiencia en la prisión, donde lo más difícil fue ingresar con un cartel de acusado por homicidio en grado de tentativa.

El portugués relató que ” El primer mes y el segundo parecía que el tiempo no pasaba porque además no tenía novedades de fuera, el proceso judicial era siempre igual. Los abogados que elegimos mi madre y yo no fue la mejor pero nos dimos cuenta después”.

Siguiendo con su testimonio, indicó que “Lloré muchas noches. Nunca lo hice delante de nadie, pero muchas noches no podía dormir y sólo pensaba en mis hijos, en el sufrimiento de mi familia”.

“Te hace pensar si realmente vale la pena dejar de pasar tiempo con tu familia para pasar tiempo con personas que no quieren tu bien y seguir caminos que no te van a llevar a ningún lado. Sufrí mucho y, sí, muchas noches lloré”, concluyó el defensa a la espera del juicio que será clave para su carrera profesional.