El 07 de agosto de 1924 es un día que marcó la historia de Barranquilla, Colombia. Ese día se fundó el Junior.

En el barrio de Rebolo, uno de los más populares de la ciudad, nacía el Juventud Infantil, nombrado así en honor a la Juventus de Italia, a la larga uno de los equipos más grandes del fútbol mundial, por la ascendencia italiana de varios de sus fundadores.

A eso del mediodía de ese 07 de agosto, en la plaza de las calles 30 y 29, se anunciaba su creación. La encargada fue Micaela Lavalle de Mejía, quien encabezó la idea de formar el elenco de los “Tiburones”.

En entrevista con El Heraldo, fue su hija, Carmen Mejía Lavalle, la que detalló ese momento. “Lo hizo con el sentido común de una madre que veía a sus hijos: Marcos, Gabriel y Juancho Mejía. Los admiraba correr y patear una pelota en los playones de arena”, indicó la mujer.

Carmen tenía apenas siete meses de vida cuando su madre proclamó al Juventud, por lo que, para muchos, ha crecido de la mano con la historia del equipo “rojiblanco”.

“Mi mamá fue la que decidió los colores del equipo. Son la bandera de la cruz de color roja con fondo blanco ondeando en los mástiles de los barcos atracados en Puerto Colombia. Ella era la que costeaba todo”, comentó Mejía.

Micaela estuvo atenta a todo lo que implicaba el club hasta que la edad se lo permitió. Falleció el 24 de abril de 1962 y, desde entonces, le ha correspondido a Carmen repetir mil veces la historia de cómo su madre fundó al Junior, un símbolo de la ciudad de Barranquilla.

Su legado no es olvidado por los hinchas “Tiburones”. En cada aniversario del club, su rostro colma las gradas del estadio Metropolitano Roberto Meléndez, en una muestra de agradecimiento por ese “amor insoportable” que Micaela les regaló.