La final de la Copa Libertadores de América en la que River Plate se impuso ante Boca Juniors por 3-1 tuvo un hombre que cambió el partido: el colombiano Juan Fernando Quintero.

El volante marcó el gol de la diferencia y se destacó como el jugador más activo del partido. Si bien entró desde la banca, el colombiano fue elegido como el jugador del partido.

Pese a la sonrisa del volante al final del partido, hay una dramática historia familiar que se esconde detrás del rostro de ‘Juanfer’. El 1 de marzo de 1995, cuando el ahora campeón de América tenía dos años, iba a empezar una pesadilla para la familia de Quintero.

Su padre, Jaime Quintero se enrolaba en el ejército colombiano. Desde entonces, Jaime nunca más ha vuelto a su natal Medellín. Su familia nunca más lo volvió a ver, ni siquiera sin vida.

“Donde quiera que esté, él sabe que mi corazón también está con él. No lo conocí, pero siento que lo que soy hoy también es por él”, dijo Juan Fernando Quintero al programa Los Informantes, de Canal Caracol de Colombia en junio de este año.

El Ejército Colombiano asegura que Jaime Quintero Cano fue expulsado al poco tiempo por mal comportamiento y consumo de drogas. Dicen que fue devuelto a Medellín en un bus municipal en donde desapareció.

Desde las Fuerzas Armadas colombianas aseguran que ellos no se hacen responsables de una desaparición que ocurre fuera de sus instalaciones. La familia se enteró de lo ocurrido en ese entonces gracias a un vecino que había ido a dejarle unas cartas.

Una tía de Juan Fernando, Silvia Quintero, ha sido la cara visible de esta búsqueda. De hecho, en 2001 puso una demanda contra el Estado colombiano que fue desestimada.

“Lo desaparecieron”, aseguró en el programa Los Informantes Juan Fernando Quintero. Su padre, que desapareció cuando tenía 23 años, debió abandonar el sueño de ser futbolista, que sí logró y con creces su hijo ‘Juanfer’.

23 años después de la desaparición de Jaime, su hijo agarró un balón intrascendente y la clavó en un ángulo del arco del Santiago Bernabéu. ‘Juanfer’ marcó la diferencia y conquistó América. Todavía no puede encontrar a su padre.