El fallecimiento de Davie Astori impactó a todo el mundo del fútbol. El jugador de 31 años, fue hallado muerto en una habitación de un hotel en Udine, donde se encontraba concentrado con la Fiorentina antes de un partido, el 4 de marzo de este año.

La repentina muerte del jugador, producto de un fallo cardíaco, obligó a paralizar el balompié italiano y motivó los homenajes para el fallecido futbolista.

Durante esta jornada, y según informa El Mundo, la justicia taliana abrió una investigación por homicidio involuntario en contra dos médicos que habrían firmado certificados que indicaban que Astori era apto para la práctica del fútbol, pese a los problemas cardíacos que sufría el capitán de la Fiorentina.

La apertura de esta investigación en contra de los profesionales que trabajaban en dos organismos públicos de Florencia y Cagliari, ocurre poco después de que un diario florentino publicase dos electrocardiogramas (de 2016 y 2017) realizados al seleccionado italiano, en el que ambos revelaban anomalías cardíacas en el futbolista.

Formado en el AC Milán, Astori jugó en el Cagliari y en la Roma antes de fichar por la Fiorentina en 2015. Fue internacional en 14 ocasiones y dejó una hija de cuatro años.