Este jueves la Unidad Disciplinaria de la Conmebol dio a conocer lo que todos estaban esperando: el fallo de la denuncia de Boca Juniors contra River Plate por el ataque sufrido en Copa Libertadores.

Tras rechazarse la presentación de los ‘bosteros’, el ente rector del balompié sudamericano sorprendió a todos al confirmar la reprogramación de la segunda final de Copa Libertadores, especialmente por la sede elegida: Madrid, España.

En este sentido, y aunque para muchos parezca un premio jugar en el estadio Bernabeu esta final de la vergüenza, en la prensa trasandina no pudieron esconder su dolor por la decisión.

Así al menos lo dejó en evidencia el periodista Martin Voogd de diario Clarín, en una columna de opinión titulada “River-Boca: nadie quería perder y al final perdieron todos”.

El columnista resalta que “fue un error enorme cuando supusimos que sería la final que todos querían jugar y que nadie quería perder”.

“Después de escenas propias de cuentos de Osvaldo Soriano -el diluvio previo a la ida-, pero también de Horacio Quiroga -el ataque al micro de Boca, las operaciones incesantes de cada lado y los desmanejos de la Conmebol-, pasó un mes y aún no se sabe quién será el campeón”, complementó.

“Así, sobre todas las cosas, el inmenso miedo a perder llevó a perder a todos”, agregó también, relatando que los presidentes de Conmebol, Boca Juniors y River Plate fueron los principales ‘damnificados’.

Sobre Domínguez, Voogd detalla que “se frotó las manos imaginando el prestigio que le daría este River-Boca y terminó mostrando que todo lo malo es posible en el fútbol sudamericano”.

“Perdió Daniel Angelici, que presionado firmó un papel comprometiéndose a jugar en la tarde del terror en el Monumental, pero horas después, también presionado, dijo que iría a fondo contra River y que no pararía de reclamar hasta que el TAS se expidiera. Ahora, después de haber tensado la cuerda y perdido parte de su capital político, su Boca ya hizo sin chistar las reservas para jugar en Madrid”, sentenció.

En cuanto a D’Onofrio, timonel de River, el periodista mencionó que “cuando hacía falta que todo se tranquilizara, mostró su costado más desafiante en una inoportuna conferencia de prensa en Mar del Plata, donde no hizo más que tirar nafta al incendio. Pidió perdón. Pero ya era tarde”.

Finalmente, Martin Voogd resumió todo lo ocurrido en el sentir de la mayoría de los trasandinos: “Perdieron todos. En realidad, perdimos todos”