Este sábado Boca Juniors y River Plate inician un camino de dos partidos que se anticipa serán la gran batalla.

Los dos equipos que comandan el fútbol argentino lograron una excelente campaña en la Copa Libertadores 2018, instalándose en la final del máximo certamen continental.

El partido ha generado un revuelo mundial. Y es que hasta el Papa Francisco se tomó un tiempo para enviar un mensaje de paz a los hinchas de ambos planteles, quienes viven y sienten este cotejo como el más importante de sus vidas.

Y puede que en cierta medida tengan razón, ya que este campeonato tiene historia, trascendencia y fama planetaria, la que pasamos a resumir con estos pequeños datos que te permitirán conocer un poco más del evento que ya tiene 58 años de vida.

Colo Colo se lleva la ‘autoría intelectual’

En el año 1948, Colo Colo decidió organizar el Campeonato Sudamericano de Campeones, un evento de carácter amistoso que reunió a los mejores equipos del continente, de esa época, en Santiago de Chile.

La cita sorprendió a todos por la positiva recepción que tuvo en la gente, lo cual fue considerado como un precedente por los dirigentes sudamericanos, que ya tenían la idea de reunir a los equipos en un solo torneo.

Pero debieron pasar años entre ese antecedente y la disputa de la primera edición de la Copa de Campeones de América, en 1960. En dicha instancia participaron los planteles de Bahía de Brasil, Millonarios de Colombia, Peñarol de Uruguay, San Lorenzo de Almagro, Olímpia de Paraguay, Jorge Wilstermann de Bolivia y Universidad de Chile, coronando al elenco charrúa como el primer gran vencedor. Ya en 1965 tomó su nombre definitivo, que lo acompaña hasta ahora: Copa Libertadores de América.

El Rey frente a los tres palos

Para nadie es secreto que, año tras año, el premio al goleador del certamen se lo pelean los delanteros de los principales clubes del continente, especialmente los de Brasil, Argentina y Uruguay.

Aún así, es necesario recordar el registro de Carlos Humberto Caszely, quien logró anotar nueve tantos en la edición 1973, siendo el único chileno en encabezar la tabla de goleo.

Casos especiales son los de los argentinos Alberto Ferrero (Santiago Wanderers, 8 goles), Juan Carlos Almada (U. Católica, 9 goles), Alberto Acosta (UC, 11 goles) y Jorge Quinteros (UC, 5 goles), quienes inscribieron sus nombres entre los máximos anotadores de las ediciones 1969, 1993, 1997 y 2006, respectivamente.

Llevan la delantera

Si quieren saber un poco más de la historia de este tradicional torneo, no duden en preguntarle a los hinchas de Independiente de Avellaneda. Los trasandinos llevan la delantera en este evento, puesto que la copa se ha ido con ellos en nada menos que siete oportunidades casi consecutivas (1964, 1965, 1972, 1973, 1974, 1975 y 1984).

De igual manera, los ‘Diablos Rojos’ pueden jactarse, con el más grande de los orgullos, que son el primer equipo argentino que ha ganado este campeonato, así como que son los únicos tetracampeones del continente.

El mejor de todos los tiempos

El máximo anotador en la Copa Libertadores tiene nombre y apellido: Alberto Pedro Spencer Herrera. El ecuatoriano, oriundo de Santa Helena, convirtió 54 goles en 87 partidos disputados, llevándose para su casa el honor de ser el artillero histórico.

Eso sí, esto no fue todo lo que Spencer consiguió entre los años 1960 y 1972, ya que su enorme talento lo llevó a estar nominado entre los mejores 20 futbolistas del continente, de acuerdo a un ranking histórico realizado por la FIFA.

Un ‘cachetazo’ a los cruzados

Si de marcadores amplios se trata en las finales, Universidad Católica puede dar fe de ello. El conjunto de la franja realizó una gran campaña en 1993, dejando en el camino a clubes como Barcelona de Ecuador o América de Cali de Colombia, de gran potencial en esa época.

Pero en la final se topó con un desafío mayor: el Sao Paulo de Telé Santana, equipo que quedó instalado como uno de los más poderosos de la historia del torneo, gracias a un estilo lujoso de juego y a un plantel lleno de talento. Y eso lo hizo notar, propinándole a los cruzados un 5-1 en la ida de la final que dejó casi sellada la definición.

Para el recuerdo quedó el inicio del duelo de vuelta, cuando la UC se puso rápidamente 2-0 y tuvo opciones de ampliar el marcador en el Estadio Nacional, sin éxito, ya que el marcador no se movió. El cuadro paulista sumó otro título en una época gloriosa, donde disputó tres finales y ganó dos títulos de la Libertadores en 1992 y 1993, mismos años donde sumó dos trofeos de Copa Intercontinental, donde venció a los poderosos Barcelona de Johan Cruyff y AC Milan de Fabio Capello.

El resultado del primer partido quedó anotado como la goleada más amplia en una final de la Libertadores, siendo seguidos por los 4-0 de Boca Juniors a Deportivo Cali en la revancha de 1978 y de Sao Paulo a Atlético Paranense, en la vuelta de la final 2005.

Tan cerca, pero a la vez tan lejos

Cobreloa pudo ser el primer equipo chileno en inscribir su nombre en la historia dorada de este campeonato. Esto, ya que en el año 1981 los loínos se instalaron en la final de la cita continental, pero se encontraron con un Flamengo de Brasil que les terminó por aguar la única fiesta.

Si bien los nortinos dieron la batalla hasta el final, obligando incluso a disputar un encuentro de desempate, no pudieron contra la artillería brasileña que se quedó con el título luego de ganar el partido final por un marcador de 2-0.

Un año después, fue Peñarol el que arruinó la opción de los ‘Zorros del Desierto’. Luego de un positivo empate sin goles en Montevideo, los chilenos tenían la opción de cerrar en Santiago y obtener su ansiado título, pero un solitario gol de Fernando Morena sobre el cierre le dio el triunfo y el título a los uruguayos.