La larga historia de idas y vueltas que envuelve el caso de asesinato y tortura de un futbolista en Brasil parece estar llegando a su fin.

Recordemos que Daniel Correa, jugador del Sao Paulo, fue hallado muerto junto a una carretera con sus genitales cortados.

Tras difundirse a nivel mundial la noticia, las muestras de pesar por la pérdida del jugador no se hicieron esperar.

Sin embargo, todo quedó en el olvido luego que tres detenidos por el caso aseguraran que el futbolista intentó violar a una mujer antes de su muerte. Se trataba de la familia Brittes.

Edison Brittes reconoció la autoría del crimen, pero explicó que lo hizo para salvar a su esposa del ‘monstruo’ que intentaba abusar de ella.

Como era de esperar, los comentarios y críticas contra el exfutbolista no se hicieron esperar, especialmente en las Redes Sociales y medios brasileños. Era el primer vuelco de la noticia.

Eso sí, las modificaciones del caso continuarían y, específicamente, contra la familia Brittes.

Resulta que mensajes de la madre del jugador y la aparición de un testigo de la fiesta, demostraron que los testimonios de Edison y su hija Allana no eran verosímiles.

Esta jornada hubo una nueva actualización del caso que complica a los Brittes. Esto luego que Amadeu Trevisan, comisario y encargado de la investigación, dijera tajante que ya hay resultados: la familia mintió.

“Desde el principio la familia Brittes mintió en el testimonio”, recalcó Trevisan en conferencia a los medios brasileños, haciendo hincapié en que “el crimen en sí ya está desvelado”, consigna O Tempo.

En relación al caso, el comisario complementó que “lo que queda por saber es por qué ha habido tanta violencia, ya que Edison ha tenido mucho tiempo para pensar”.

“También vamos a concluir por qué hubo la participación de otras personas”, agregó Trevisan.

Según los reportes de los medios de Brasil, se espera que este jueves el principal acusado vuelva a comparecer. En la Policía esperan que esta vez diga toda la verdad.