El técnico de River Plate, Marcelo Gallardo, violó la sanción que le había impuesto la Conmebol (castigo por retraso) en el duelo de anoche ante Gremio por la Copa Libertadores.

El ‘muñeco’ tenía prohibición de dirigir a su equipo y debió ubicarse en el palco del estadio, mientras su ayudante Matías Biscay lo reemplazaba en la banca.

Sin embargo, en el entretiempo, el DT de los ‘millonarios’ se camufló con un gorro y se metió al vestuario para darle instrucciones a sus jugadores, que en ese momento perdía 1-0.

Las autoridades de la Conmebol se dieron cuenta de la situación y sacaron rápidamente a Gallardo del camarín.

Como si fuese poco, las cámaras de la transmisión captaron a un ayudante del técnico argentino, Esteban Buján, con un auricular, siendo que la sanción también prohíbe el uso de dispositivos electrónicos.

Tras el partido, el técnico fue consultado en la zona mixta por la polémica, señalando que reconocía el hecho aunque no se arrepiente de haberlo realizado.

“Lo asimilo y lo asumo también, pero era lo que necesitaban, lo que yo sentía que tenía que hacer y no me arrepiento para nada”, dijo.

“Es indignate no tener la posibilidad y la libertad de poder trabajar”, agregó.

“Está en el reglamento, lo acepto, pero no me iba a privar de estar en el vestuario con mis jugadores en el momento que más lo necesitaban”, cerró.

Señalar que River Plate venció por 2-1 a Gremio y clasificó a la final de la Copa Libertadores.