A sus 65 años, Iván Arenas tiene claro por qué fue víctima de un infarto esta semana, el que causó gran susto en su entorno y en el mundo del espectáculo.

En una entrevista con el diario Las Últimas Noticias, el humorista culpó al stent que tiene en su corazón, que es una endoprótesis vascular que impide que la arteria se cierre.

nlm.nih.gov
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Pero a lo anterior, sumó también su mayor vicio: el cigarro. “Mi mayor problema es el cigarro. Me fumo una cajetilla diario de esos mentolados”, comentó.

“Sé que tengo que empezar a cuidarme pero, por ejemplo, ahora que hablamos del cigarro me dan ganas de fumar al tiro. Con la comida no tengo problemas, y claro, voy a tener que empezar a comer más verduras”, adelantó.

Sobre lo ocurrido, no dramatiza: “No le voy a poner color, si esto se veía venir. No me cambió la vida, no vi el túnel”.

El jueves Arenas fue sometido a una angioplastia, operación que ya se había hecho previamente. Eso mismo le sirvió como antecedente para saber qué hacer cuando le vino el dolor al pecho. “Llamé yo mismo a Help para ir a una clínica”, recordó.

Para este sábado Iván Arenas podría ser dado de alta.

Felipe Núñez no está de acuerdo con que haya sido un problema del stent. “Si él se hubiera cuidado más, esto no habría pasado. Su stent hubiera durado mucho más”, estimó.

Lo mismo opinó Jenny Contardo, ex Amor Ciego 2 y amiga del humorista. “Siempre se salta los almuerzos, no toma agua y ya debiera empezar a cuidarse”, reveló.