Un capítulo especial de Contra viento y marea se vivió este domingo en Canal 13, cuando la producción se puso en contacto con varios exparticipantes para saber cómo se encontraban.
Una de ellas fue Valentina, cuya trágica historia impactó a todo Chile. La joven quería cumplir el sueño de su entonces novio, Ricardo, quien a pesar de tener un tumor en la médula espinal, que lo mantenía postrado en su cama, quería casarse con ella.
La pareja logró superar todos los obstáculos y consiguieron llegar al altar, donde tuvieron una bella ceremonia. Un mes después de eso, el joven falleció.
A seis meses de aquello, Valentina contó cómo ha sido su vida sin su marido. “Estoy tranquila”, reveló a Pancho Saavedra. “Siento que me acompaña en todo momento”, agregó.
“Él no solamente me entregó amor, también me dejó muchas enseñanzas en la vida y lo amo con toda mi alma, es un amor que jamás en la vida se va a acabar”, reconoció.
Valentina también recordó que ella siempre tuvo la esperanza que su novio iba a mejorar, pero que “al final entendí que él quería descansar, lo necesitaba”. “Tuvimos una conversación y le dije ‘si tienes que irte para descansar, tienes que hacerlo. No quiero implorarte que hagas algo sólo por mi"”, recordó.
La joven también reconoció que no ha vuelto a hablar con la mamá de su esposo, quien nunca apoyó su relación ni tampoco fue a la boda de ellos. “No se ha acercado, no nos hemos visto, no hemos hablado, nada”, dijo.
“Es lo mejor que podría pasar. Ella sigue con su vida y yo con la mía. Para mi tratar con ellos sería un retroceso. He avanzado mucho desde que él murió y yo no quiero retroceder, quiero avanzar”, agregó.
“La enseñanza que me dejó mi historia con él, es que las cosas simples son mejores”, finalizó.
Otra historia que también causó un gran impacto en Chile, fue la de Nataly (33) y Carlos (29), mostrada el año pasado.
Los novios llegaron al programa gracias a un tuit en el que pedían ayuda a diferentes rostros de televisión para poder casarse, debido a que el Registro Civil les daba hora para marzo del 2019. El gran problema es que ella sufría de un cáncer cervicouterino en etapa cuatro, por lo que le quedaban pocas semanas de vida.
Pero el objetivo principal de su matrimonio no sólo era romántico, sino que también legal, ya que el hombre quería tener la custodia de los hijos de ella, a quienes considera propios, para evitar que tuviesen que pasar un juzgado o incluso por el Sename, si el padre de los niños (que estaba en la cárcel) decidía hacer algo.
Carlos y Nataly se casaron en una emotiva ceremonia que llevó a las lágrimas al animador. Sin embargo, dos meses después, ella falleció.
En medio del dolor, Carlos consiguió la custodia de sus hijos. “Me da tranquilidad saber que mis niñas estén conmigo. Mi guatona me dejó un mensaje de tranquilidad, y sé que mis hijas quedarán conformes al saber que tienen un ángel (sic)”, añadió.
Nueve meses después, Carlos se reencontró con Saavedra para hablar de su vida. “Fue difícil. Hay días en que no quiero hacer nada, no me quiero ni mover”, reconoció y agregó que sus hijas también extrañan mucho a su mamá, pero “ahí tengo que estar para apapacharlas”.
Sin embargo, gracias a la ayuda del programa y el ministerio de Vivienda y Urbanismo de Chile, Carlos por fin pudo cumplir su sueño y se convirtió en propietario de la casa que compartió durante siete años con Naty.
“Ella me hizo sentir que estaba presente en todo momento”, afirmó él al momento de conocer la noticia.
Carlos también agradeció el gran cariño de la gente tras la emisión del programa. “Estoy inmensamente feliz con ellos, con los mensajes de Chile y el extranjero. Los agradezco mucho”, finalizó.
