Corría 2014 cuando comenzó la emisión de la serie How to get away with murder a través de la señal ABC, en Estados Unidos. Con el tiempo comenzó a internacionalizarse con doblajes y subtítulos, llegando incluso a la plataforma de streaming Netflix, donde hoy se pueden ver cuatro de sus cinco temporadas.
En septiembre próximo será estrenada la sexta parte de la serie creada por Peter Nowalk y producida por Shonda Rhimes para ABC. El acuerdo entre Netflix y la cadena de televisión norteamericana permitiría que meses después de su transmisión original, los capítulos sean publicados en línea.
La trama es protagonizada por Annalise Keating (Viola Davis), una prestigiosa abogada afroamericana y profesora de Derecho en la Universidad de Middleton, en Filadelfia, quien recluta a cinco de sus mejores estudiantes de la clase: Wes Gibbins (Alfred Enoch), Michaela Pratt (Aja Naomi King), Connor Walsh (Jack Falahee), Laurel Castillo (Karla Souza) y Asher Millston (Matt McGorry).
El equipo debe asesorar a criminales, en su mayoría autores de asesinatos, para intentar demostrar su inocencia, sin importar si en realidad son culpables. Cada capítulo está marcado por conflictos éticos, amorosos y familiares.
La historia con spoilers
How to get away with murder comienza, como es de esperarse, con un asesinato que debe resolverse. Fue el de Lila Stangard, una joven que estaba embarazada de Sam Keating (Tom Verica), esposo de Annalise, sin que ésta lo supiera.
La principal sospechosa por el crimen es Rebecca Sutter, una joven amiga de la víctima que no tiene cómo pagar un buen abogado. Así es como conoce a la profesora de Middleton, quien la defiende y logra demostrar su inocencia, aunque con el tiempo se convierte en enemiga.
Y es que en el intertanto, Rebecca descubre que Sam estaba involucrado en el crimen de Lila y, acompañada por los cinco estudiantes de Annalise en un intento por desenmascararlo, el hombre termina muerto por un fuerte golpe en su cabeza. El autor: el alumno Wes Gibbins.
Con la venia y asesoría de Annalise, los estudiantes descuartizan y queman los restos de Sam, para más tarde tirarlos a la basura. Así comienza toda una historia de encubrimiento en la que, con los capítulos, hay más muertos, más clientes y más personajes.
‘Coliver’ y la censura en Italia
El personaje de Connor es abiertamente homosexual y no esconde su promiscuidad. Es en la primera temporada que conoce a Oliver Hampton (Conrad Ricamora), un especialista en tecnología seropositivo, con quien tuvo relaciones sexuales apenas se conocieron.
Pero con el tiempo comenzaron a enamorarse y finalmente, con el paso de los capítulos, terminan casándose con el apoyo de sus compañeros y familiares.
La primera escena sexual de Coliver, como es conocido el romance por Connor y Oliver, fue una de las más polémicas en la retransmisión en Italia, pues la cadena de televisión estatal Rai decidió censurarla, emitiendo sólo los amoríos heterosexuales.
El creador Pete Nowalk fue quien acusó, a través de Twitter, que esto ocurrió en julio de 2016. “A los espectadores italianos, aquí está la escena de Coliver, como pretendíamos que la vieras”, escribió en la red social, junto al video.
Italian viewers, here is the Coliver scene as we intended you to see it: #HTGAWM pic.twitter.com/5r51LMSzPM
— Pete Nowalk (@petenowalk) July 9, 2016
Rápidamente también reaccionó la productora Shonda Rhimes, quien mediante la misma plataforma tuiteó que “la censura de cualquier amor es inexcusable”. Y en la misma línea, Jack Falahee se preguntó si “¿las audiencias en Italia no están listas para la vida real?”.
Lo mismo pasó en Filipinas
Tres meses más tarde, en Filipinas ocurrió lo mismo. Era Sonny Channel y la cadena de televisión Orbit Showtime Network (OSN), que transmite para el Medio Oriente y el norte de África, las encargadas de emitir la serie.
Fueron los actores involucrados quienes nuevamente se quejaron a través de las redes sociales. Conrad Ricamora manifestó: “¡¿En serio?! OSN (…) Corta beso de Coliver. Necesitamos igual representación. Amor es amor”.
Falaheee, en tanto, emplazó: “Hey Sony Channel y OSN, necesitamos igual representación en pantalla. ¿Por qué cortaste esto? El amor gana”.
Sonny Channel debió salir a rectificar y en un comunicado público anunció que la escena, finalmente, sería transmitida en un próximo “especial” de la producción.
El Emmy y la casi chilena
El rodaje de How to get away with murder significó un gran logro para el público afroamericano. Viola Davis, por su interpretación de Annalise Keating, se convirtió en la primera mujer negra en ganar un premio Emmy.
Ocurrió en 2015, en la 67° ceremonia que reconoce a la televisión estadounidense. Muy emocionada sobre el escenario, lanzó una de sus mejores frases. “Lo único que separa a las mujeres de color de otras mujeres, son las oportunidades”, dijo.
Y quejándose por los pocos papeles principales para las afroamericanas en el mundo del espectáculo, cerró: “No puedes ganar un Emmy por papeles que simplemente no existen”. Más tarde se bajó del escenario en medio de aplausos ensordecedores.
Quien siempre estuvo con ella es la actriz Karla Souza, nacida en México. En el mismo año, fue destacada por la revista Variety como una de las promesas en la industria latina. Y aunque parezca extraño, tiene una fuerte conexión con Chile.
Y es que su padre es un chileno radicado en territorio azteca. “(Él) era zapatero, tiene su marca que se llama Surfeel. Y mi madre, después de ser maestra en el ´Montessori´, decidió sólo cuidarnos”, reveló Souza en una antigua entrevista recogida por BioBioChile.
Previo a su ingreso al espectáculo, la intérprete de Laurel Castillo fue gimnasta. Su amor por el deporte fue tal, que su papá vendió todos sus bienes y se trasladó a vivir a Francia y EE.UU., para que su hija pudiese entrenar con los mejores. Eso, además, le ha permitido hablar sin problemas distintos idiomas en la serie.
El final
Septiembre próximo, con el estreno de la sexta temporada, marcará el cierre de la historia. Serán los últimos 15 capítulos en los que Annalise enseñe a sus alumnos cómo defender a un asesino.
Así anunció su creador, Pete Nowalk, en un comunicado. “Decidir terminar esta serie fue una decisión brutal, pero en última instancia, la historia te dice qué hacer, como lo hizo aquí. Para mí, el viaje de Annalise Keating siempre tuvo un final claro”, informó.
“Sabiendo que me quedan 15 episodios para terminar su historia, y la oportunidad de dar a todos los personajes sus propios finales asesinos, es un regalo que rara vez se le da a un creador de la serie”, añadió.
En el escrito, Nowalk agradeció al elenco, a los escritores y a su equipo por “dedicarse a la experiencia más gratificante” de su carrera. “También quiero agradecer a nuestros fanáticos. La única razón por la que existe este programa es por su lealtad y entusiasmo. No puedo esperar a que todos ustedes vean cómo termina, con giros y vueltas y toda la locura que nos encanta crear”, sentenció.
