El pasado 19 de julio y mientras presentaba un musical de La Sirenita, la bailarina Camila Vásquez se lesionó en el escenario de Rojo, el color del talento.

La joven se dislocó el hombro y requirió de varias semanas recuperación, por lo cual debió dejar la competencia de la primera temporada.

Sin embargo, la artista no se alejó completamente del espacio buscatalento, ya que cuando se recuperó, era común verla en pantalla bailando en primera fila en los “recreos musicales” e incluso como conductora dual para las transmisiones en vivo de las redes sociales del programa.

Por lo mismo, muchos televidentes se sorprendieron al verla seleccionada para ser parte del segundo ciclo del programa y quedar entre los 12 bailarines elegidos para competir en la nueva temporada.

En redes sociales los comentarios en su contra no fueron pocos y muchos aseguraban que tendrá una ventaja por sobre sus compañeros, ya que el público la conoce y la apoya, además de ya tener experiencia frente a las cámaras.

“Ella tuvo una lamentable lesión en vivo, al aire, y no quedó fuera por una razón artística”, explicó a BioBioChile Gonzalo Cordero, productor ejecutivo del programa.

Según comentó, ellos conversaron con Camila y le explicaron que las reglas del espacio permitían que los participantes tuviesen sólo dos semanas de licencia, tras lo cual debían retirarse de la competencia y, si así lo querían, volver a postular para el nuevo ciclo.

“Todos los que se han ido, nunca han dejado de estar en el programa. Todos los que se han ido, siempre han seguido, como Juanfra (Matamala) y otros”, añadió.

De hecho, para Cordero, las apariciones previas de Camila pueden no ser necesariamente una ventaja. “Creo que aquí vota la gente, y si ellos consideran que es una ventaja, lo van a manifestar así. Y la verdad es que el jurado ve, no si lo hizo bien en un (streaming de) Instagram o en la transmisión de Facebook Live, sino lo que hizo en el escenario”, agregó.

Para el productor, algunas personas incluso podrían llegar a pensar que es una tremenda desventaja para la participante, ya que la exigencia para ella podría ser mayor que para el resto de sus compañeros que comienzan desde cero.

“Esto es súper abierto, esto está para lo que la gente diga, y uno tiene que saber interpretar lo que la gente dice”, finalizó.

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