Tras terminar las grabaciones del reality ¿Volverías con tu ex?, Claudia Conserva se alejó de las cámaras y se dedicó por completo a su familia. La animadora se convirtió en dueña de casa, haciéndose cargo de absolutamente todo, incluyendo el aseo de su hogar.

Pero como la vocación llama, la comunicadora regresará a la pantalla chica con un nuevo programa en UCV-TV. El espacio que la tiene muy entusiasmada, fue desarrollado y presentado por ella a la estación, y llevará por nombre MILF (Mujeres independientes, libres y felices).

“La experiencia de mis programas anteriores había sido buena, pero son formatos que te obligan a respetar ciertas reglas. En el reality puede haber alguien llorando al lado mío, pero yo no puedo abrazarlo o consolarlo, porque la idea es que llore. Entonces decidí hacer algo que se ajustara a mi personalidad”, reconoció a El Mercurio.

En el programa que debutará este mes, la animadora estará acompañada de dos panelistas, con quienes abordará temas femeninos a través de la conversación y el humor. “Es un trabajo bastante artesanal; incluso he ido a comprar cada uno de los palos para construir la escenografía; pero me tiene muy feliz. Estoy segura de que va a tener alma, algo de lo que carecen los programas en la televisión chilena. Además, tiene la adrenalina de que si no funcionara, es mi responsabilidad“, afirmó Conserva, quien también tuvo ofertas de otro canal.

“Me quiero dar el lujo de hacer el proyecto que quiero y con quien quiero; por eso dije que no a lo otro, y seguí adelante con esto”, agregó.

Su dolorosa salida de TVN

La conductora también aprovechó de hablar de su salida de TVN, donde fue despedida en 2015. “Fue un momento bien traumático porque uno confía y hace apuestas. Sin embargo, terminaron anticipadamente un contrato firmado por razones que supuestamente respondían a crisis económica. Ese fue uno de los argumentos que me dieron cuando me despidieron”, sentenció.

“Pero con el tiempo uno se da cuenta de que tiene que ver con las decisiones que toman los ejecutivos. No hay que ser muy inteligente para darse cuenta de que cada jefe nuevo quiere poner su equipo y su marca. También amistocracía y favores políticos; uno es víctima de esas decisiones“, expresó.