Este miércoles se estrena Nadie está libre, la esperada apuesta de Canal 13 que ha desatado curiosidad en los televidentes debido a las potentes imágenes de sus adelantos.
El docurreality mostrará a jóvenes sin rumbo y que viven sus vidas al límite, pasar por una experiencia extremadamente compleja durante un día en la cárcel.
En su episodio debut se contará la historia de tres madres, quienes deberán vivir como reclusas y compartir con sus pares. En paralelo sus familias que acudieron a la producción para solicitar la ayuda del programa, verán las vivencias de sus hijas junto a la abogada y conductora Macarena Venegas.
“Nuestro objetivo es ayudar a estos padres que están desesperados porque sus hijos perdieron el rumbo (…) ellos lo han intentado todo. Los han llevado a los mejores psicólogos, a los mejores psiquiatras, se han puesto duros con ellos, lo han intentado todo pero no les ha resultado nada. Es ahí cuando estos padres nos piden darles un remezón para que ellos entiendan que deben cambiar su comportamiento, porque además temen que sus hijos terminen tras las rejas por el estilo de vida que están llevando“, señaló Mariano Gallardo, director de contenidos de Canal 13.
A pesar de los peligros que se podría pensar que vivieron los jóvenes en prisión, Gallardo es claro en señalar que en ningún momento su integridad física se vio comprometida. “ Siempre estuvimos resguardados por personal de gendarmeria. Los chicos nunca estuvieron solos“, agregó.
Además antes de cada grabación, un equipo del programa conversaba con algunos de los encarcelados a quienes les contaban de qué se trataba el espacio y la vida que llevaban sus protagonistas, aunque las sorpresas no fueron pocas. “En una cárcel sobrepoblada, siempre entraban algunos reclusos extras en algunas situaciones que estábamos grabando, así que se dieron distintos episodios pero su integridad, estuvo siempre resguardad”, explicó.
Un sospechoso parecido
El espacio no ha estado libre de polémicas, pues el formato es bastante parecido a la docuserie del canal A&E Beyond Scared Straight estrenada en 2011, y que estuvo al aire durante nueve temporadas.
En dicha producción se reclutaba a adolescentes con antecedentes criminales, problemas de drogas, promiscuidad, afiliación a pandillas y violencia, para internarlos en una cárcel donde pasaban un día junto a los presos.
“No nos inspiramos en ese programa”, señaló Gallardo. “Son distintos. Es un programa que de partida se hizo en el 2011 y nosotros comenzamos con el Nadie está libre en 2008. Ellos tienen a menores de edad que delinquen y los llevan a la cárcel, porque son niños que están delinquiendo y les muestra qué es lo que les espera“, agregó.
“En nuestro caso, son chicos mayores de edad, no son delincuentes los protagonistas que nosotros tenemos. El perfil es distinto. Además, en nuestro programa el foco está puesto en los padres, acá son ellos los que nos piden ayuda”, agregó el profesional.
“Ellos en todo momento están viendo lo que sus hijos están viviendo dentro de la cárcel (…) incluso se enteran de cosas que no sabían. Hay muchas revelaciones como que se sus hijos consumían cocaína o que habían tenido accidentes por manejar en estado de ebriedad. También hay otros momentos súper potentes donde hacen un mea culpa de que quizás se equivocaron en algo o se preocuparon de darle más cosas materiales”, continuó.
“Ambos se desarrollan en la cárcel, pero tienen focos distintos, tienen perfiles distintos y la realización es completamente distinta”, finalizó.
Cabe destacar que Nadie está libre comenzó en 2008 con la conducción de Diana Bolocco, Héctor Noguera y Cristián Sánchez, siendo el primer programa en adentrarse con cámaras en el día a día del mundo de la cárcel.
