Un peligroso imprevisto vivió la cantante Carolina Molina durante la grabación de su último videoclip en Baños Morales (Cajón del Maipo, Región Metropolitana).

La situación ocurrió el miércoles, cuando “La Rancherita” y su equipo recorrían la zona registrando imágenes para Lejos de mi vida, su nuevo single. “Aprovechamos de ir a la nieve, pero nunca pensé que nos iba a pasar algo tan fuerte”, comentó al diario La Cuarta.

“Llevábamos como el 90% del video y de pronto se nos cortaron las cadenas de la van en la que estábamos. Fuimos súper preparados, con todas las medidas de seguridad, pero uno nunca puede controlar del todo a la naturaleza”, recordó la intérprete.

“El tema de las cadenas hizo que se nos enterrara la camioneta y no podíamos salir. Al principio era todo risas y sin mayores preocupaciones, pero cuando ya habían pasado cuatro horas y el combustible se comenzó a acabar fue que nos preocupamos, porque sin bencina se apaga todo y nos quedaríamos sin calefacción”, comentó Molina, quien además compartió en Instagram imágenes al respecto.

Sin bencina ni calefacción, la cantante temió lo peor. “Pensé que podría haber muerto de hipotermia. Cayó la noche y sin calefacción la cosa se puso negra. Por suerte fuimos con un instructor de montaña el que fue muy aperrado, porque decidió bajar a un pueblo que está cerca de donde nos habíamos quedado enterrados”, dijo.

La solución del instructor, sin embargo, tampoco fue un alivio para el grupo. “Nos preocupamos, porque se fue a pie y se demoró como dos horas y media en volver. Ahí yo ya estaba muy preocupada e incluso con el equipo nos habíamos comenzado a desesperar”, agregó.

Tras su regreso, Francis (el instructor) y otros colaboradores asistieron al equipo realizador. “Tengo que darle las gracias a mi equipo de grabación, ellos fueron muy profesionales y decidieron que si yo podía termináramos el video. Y así fue, una vez que tomé color, me maquillé y terminamos las últimas escenas”, apuntó Carolina Molina.