En 2016, antes que comenzara la ola de denuncias de acoso sexual en el mundo del espectáculo, la actriz Blanca Lewin escribió un potente y personal mensaje en su cuenta privada de Facebook donde relataba varias traumáticas experiencias que le tocaron vivir a lo largo de su carrera.

A fines de noviembre de ese año e inspirada por el testimonio de la actriz argentina Antonella Costa (quien confesó varias situaciones de acoso en la industria de su país), Lewin reconoció también haber sido víctima de abuso por un director de cine, un director de fotografía, un cantante lírico y un “famosísimo conductor de televisión”.

El mensaje de la actriz chilena fue rescatado por el periodista Daniel Olave y publicado -con previa autorización de la artista- en una columna para The Clinic, titulada Machismo en el cine chileno, las mujeres se están organizando.

Según la actriz, cuando era una estudiante de teatro y tuvo que hacer su primer desnudo frontal, un director -cuyo nombre no reveló- la grabó durante varias horas “ensayando” una escena de sexo. “No contento con eso me llamó a ‘doblar’ únicamente los gemidos de esa escena, para luego llevarme a casa y acosarme antes de bajarme del auto insistiendo en que ‘yo quería’ y ‘a mi me gustaba"”, escribió.

“Siendo una ingenua estudiante de teatro, recién ahí entendí y lo mandé a la mierda. Me he encontrado contigo en festivales impostando un acento ridículo, y como apoderado del colegio de mi hija buscando complicidad sonriente en alguna Asamblea de Padres. Patético”, sentenció.

Archivo | Agencia UNO
Archivo | Agencia UNO

También mencionó a un director de fotografía “que continúa formando a nuevas generaciones”. “Después de otra escena con desnudo, hizo gran alarde de sacar a todo el equipo del set, mientras tenía a todos muertos de la risa y pegados al monitor, y que, luego de que mi partner de escena hiciera un chiste después del corte, los alentara a entrar celebrando al set, mientras yo aún estaba desnuda”, dijo.

También acusó a un “admiradísimo cantante lírico que se permitió meterme el dedo en el culo porque ‘notó’ que tenía el vestido levemente descosido justo ahí”. “Lo denuncié ante los respetables músicos ‘históricos’ con los que promocionaba una hermosa gira en ese programa de televisión, y se hicieron los huevones“, señaló.

Asimismo, también escribió sobre un “famosísimo conductor de televisión que me hizo la cruz y me insultó luego de que yo me negara a besar a los bailarines y cantantes de su programa ‘replicando’ escenas de teleseries hechas originalmente por profesionales de la actuación (e intentara proteger a mis compañeras del mismo abuso)”.

No obstante, la actriz también agradeció a quienes sí la habían protegido y permitido desarrollar su trabajo artístico. “Afortunadamente pertenezco a una generación donde esas cosas ocurren cada vez menos, o donde al menos el pudor frena estas actitudes de violencia machista. O quizás, por la edad que ostento, ya no soy ni blanco fácil ni objeto de deseo evidente”, añadió.

“Pero ellos siguen ahí. Los mismos que promueven la idea, lamentablemente aún instalada en nuestra sociedad, de que las actrices en algún modo somos putas. A ustedes tuve la oportunidad de pararles el carro, posiblemente a muchos otros no, pero gracias Antonella Costa por tu valentía y por ser siempre una inspiración para mi, desde tu primera película”, finalizó.