Hace algunas semanas un programa argentino aseguró que había encontrado a la madre perdida de Luis Miguel, Marcela Basteri, quien desapareció en 1986, cuando el cantante era un adolescente.

Sin embargo, todo se trataba de un error. La mujer que acaparó portadas en España y Latinoamérica, es una española que había sido dado por muerta en 1992.

Gracias a la viralización de su imagen, su familia la pudo reconocer y descubrir que no había fallecido como pensaron durante los últimos 26 años.

Identificada como Honorina Montes, la mujer es oriunda de San Julián de Bimenes, un pueblito asturiano de 300 habitantes, desde donde desapareció sin dar dejar rastro.

Tras dos años sin tener contacto con ella (no había movimientos en sus cuentas bancarias ni llamadas telefónicas), la familia decidió dejar de buscarla e incluso hicieron una misa en su honor para despedirla.

Honorina a la izquierda y Luis Miguel y su madre a la derecha
Honorina a la izquierda y Luis Miguel y su madre a la derecha

La verdad

En el video captado por la prensa argentina donde se mostraba presuntamente a la madre de Luis Miguel, Honorina señalaba que no tenía hijas y que si no le creían preguntaran en Bimenes. Esto despertó la curiosidad de una cibernauta que envío las imágenes a una amiga que vivía cerca del sector.

Esta amiga reenvío el video a una vecina de San Julián de Bimenes, quien de inmediato reconoció a Honorina. De esta forma se puso en contacto con el hermano de la mujer, quien quedó sin palabras al verla. “Al principio no entendía nada, ni qué tenía que ver ese vídeo conmigo, hasta que fui reconociendo a mi hermana. No me lo creía”, señaló a El País Rubén Montes, un ex minero de 52 años.

“Me dejó un poco descuadrado enterarme de que está viva después de todo este tiempo. Pasé tres días de los nervios”, reveló.

Pese a que la noticia lo pone muy contento, también le deja un sentimiento amargo, pues debe ocultar la información a su madre de 84 años, quien presenta síntomas de demencias y otras enfermedades, por lo que la sorpresa podría provocarle un fuerte daño a su salud.

“Ahora vive muy tranquila. Si yo supiese que Nori (como le decía a su hermana) va a querer venir pues sería el primero a decírselo”, agregó.

Recordemos que actualmente Honorina vive en las calles de Buenos Aires, y al parecer padecer algún tipo de trastorno mental.

Pese a esto, Rubén reactivó la denuncia por desaparición de su hermana, para que el consulado español en Argentina lo ayuden a encontrarla nuevamente.

El País
El País