Una de las producciones más vistas por los chilenos en Netflix, por estos días, es Fate: The Winx Saga, una serie que al parecer está cautivando a los suscriptores del servicio de streaming, pero no mucho a los críticos.

Pero ¿de qué se trata exactamente esta apuesta?

La saga Winx sigue la historia de un internado de magia al que asisten hadas adolescentes de distintos tipos, y que se ubican en el “otro mundo”. Allí aprenden a manejar sus poderes mágicos, mientras navegan por las hormonas típicas de su edad, rivalidades entre compañeros, triángulos amorosos y monstruos que acechan su existencia.

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Sin embargo, no se trata de una producción original, sino que está inspirada en la serie animada de Nickelodeon Winx Club, creada por el italiano Iginio Straffi a principios del 2000.

La apuesta fue muy rupturista en su época y alabada en su tiempo por mostrar diversidad racial en sus personajes, cuya ausencia en el programa de 2021 es una de las principales críticas que ha recibido.

Esta vez, el programa está en manos de Brian Young (The Vampire Diaries), quien oficia como showrunner y productor ejecutivo. Además es protagonizada por Abigail Cowen, conocida por su rol en Chilling Adventures of Sabrina.

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La nueva serie sigue a Bloom (Cowen), un hada estadounidense de 16 años, con un pasado misterioso, que sin contarle a sus padres se inscribe en Alfea, una escuela de hadas legendaria donde todos tienen marcados acentos británicos, a pesar de no estar en Inglaterra.

Hermosa y valiente, Bloom llama la atención de Sky (Danny Griffin), el chico más popular de la escuela y el reciente ex novio de su celosa compañera de cuarto, Stella (Hannah van der Westhuysen).

A diferencia de sus compañeros, Bloom acaba de enterarse de sus poderes luego de perder control y prender fuego a la casa de su familia. Aún así, sus maestros están de acuerdo en que ella tiene un potencial increíble, lo que confirma cuando acepta sus poderes en lugar de huir de ellos.

Pero a pesar que el programa original pudo haber marcado la infancia de muchos, la nueva producción de Netflix no ha conseguido buenos comentarios.

En Rotten Tomatoes, por ejemplo, su índice de aprobación es de 31%. “Si no estás apoyando a tu protagonista, la mitad de tu batalla ya está perdida. Lo siento, Winx Saga, pero estás destinada a mi lista de ‘uno y nada más"”, escribió en su reseña Tilly Pearce del diario inglés Metro.

“Al rechazar la estética y el ambiente de su material de origen por completo por una pálida imitación de otras propiedades de YA, Fate: The Winx Saga termina deslizándose por grietas”, añadió Caroline Framke de Variety.

“¿Necesitábamos otro remake oscuro de una querida serie infantil?”, agregó Joel Keller de Decider.

La primera temporada de la serie ya está disponible en Netflix.