Star Wars: Episodio IX – El ascenso de Skywalker marca el final de la saga que muestra la historia de la familia Skywalker a través de varias generaciones, un suceso que era altamente esperado por miles de fans.

Lamentablemente, la actriz Carrie Fisher, que interpretaba a la icónica princesa y general Leia, no pudo llegar a ver esta conclusión, porque falleció el 27 de diciembre de 2016, antes de que empezara la producción del filme.

Pese a ello, Fisher aparece en la película, gracias a que los realizadores rescataron escenas no utilizadas que grabó para las cintas anteriores y las insertaron digitalmente.

Pero no en todas se usó material 100% reciclado. La secuencia donde aparece una joven Leia entrenando para ser jedi junto a su hermano Luke fue grabada por otra actriz: nada menos que su hija Billie Lourd.

Lourd, que en la nueva trilogía interpreta a la teniente Kaydel Ko Connix de la Resistencia, tomó el personaje por su madre para dicha parte y su rostro fue modificado digitalmente, reveló el supervisor de efectos especiales, Patrick Tubach, en entrevista con el portal Yahoo!.

En tanto, Luke fue representado por el mismo Mark Hamill, quien fue rejuvenecido con computadora.

“Billie estaba interpretando a su madre. Fue una cosa conmovedora y algo que nadie se tomó a la ligera, el hecho de que estuviera dispuesta a reemplazar a su madre”, expresó.

Tubach acotó que el director JJ Abrams le pidió a Billie que fuese la princesa Leia en la comentada escena.

“Fue algo muy especial para todos el verla en esa posición. También fue genial para nosotros. Si vas a hacer que alguien actúe la parte (de Fisher), es genial que sea ella (Billie) porque hay muchas similitudes entre ambas, de las que pudimos agarrarnos. El verdadero desafío fue lograr que el material de Leia con el que teníamos que trabajar calzara con esa escena”, añadió.

Las imágenes de Leia de joven que usaron para editar esa escena provenían de El retorno del jedi, dijo anteriormente el coguinista Chris Terrio a la revista The Hollywood Reporter.