El actor colombiano Andrés Parra, famoso en Latinoamérica por haber interpretado al narcotraficante Pablo Escobar en El Patrón del Mal, constantemente comparte historias en sus redes sociales, algunas de ficción y otras que sí ocurrieron.

Una de las más recientes que subió a su Twitter sucedió en Chile, ocasión en la que por un descuido perdió sus tarjetas de crédito, su licencia de conducción y los pasaportes de su familia.

“A mi favor tengo que decir que soy un cuidadoso compulsivo con ese tipo de documentos. Soy el ‘Macho Alfa Lomo Plateado’ que carga siempre lo de todo el mundo”, comenzó señalando.

Durante un vuelo de Buenos Aires a Santiago del sábado pasado, el intérprete guardó toda esta documentación en un pequeño estuche que le regaló su esposa.

“Al entrar, el man de inmigración nos bombardeó a preguntas. Teníamos cara de querer quedarnos supongo. Que cómo, que por qué, que cuándo, que dónde… Hasta que nos dejó pasar. Sea como sea te pones nervioso y empiezas a pensar en un capítulo de ‘Preso en el Extranjero’”, relató, con su habitual sentido del humor.

“Para mí, ahí comenzó la tragedia… El baby empezó a llorar, la suegra necesita hacer del cuerpo, sobre mi colgaba el cargador, dos maletas gigantes, mochila en la espalda, y los documentos en la mano… Pasamos las maletas por aduana, entregamos los papeles, y logramos salir”, prosiguió.

“Sábado a las 5 pm estábamos en el apartamento tranquilos y felices, nos bañamos, nos dormimos y todo era felicidad”, continuó, escenario que cambió drásticamente a las 20:00 horas del domingo, cuando descubrieron que el estuche en que habían guardado sus documentos había desaparecido.

“Revolcamos la casa y nada. ¡Lo habíamos perdido todo! Yo quería llorar y ya. Cuatro indocumentados in the house”, escribió, añadiendo: “¡Revolqué hasta la suegra compadre! Y nada ¡Se perdió todo!”.

Fue en ese momento en que llamaron al conductor que los había transportado, quien les señaló que en el vehículo no se había quedado nada, razón por la que al actor solo le quedó una alternativa: ir al aeropuerto y preguntar.

“Llego a ese lugar con el corazón en la boca, pregunto por objetos perdidos y me llevan a una puerta metálica. Me dicen que toque ahí hasta que alguien venga”, indicó.

“Finalmente un man me abrió y me preguntó qué necesitaba. Le expliqué que había perdido todo y que sospechaba que podía haber sido en la zona de aduanas. Me mira, me hace pasar…”, siguió narrando.

Luego de que revisar un enorme cajón que estaba repleto de pasaportes, cédulas y dinero, y ver que sus documentos no estaban, el funcionario abrió una segunda gaveta en la que finalmente encontró lo que tanto había estado buscando.

“¡Lo abracé! ¡Lo abracé fuerte! ¡Y el alma volvió a mi!”, recordó. “¡Dios es bueno! ¡Dios y la gente honesta de este mundo! A todos gracias!”, añadió.

Finalmente compartió una imagen en la que muestra feliz el estuche que contenía sus pasaportes, dinero y documentos.