Keira Knightley (32) es una de las actrices británicas más famosas en la actualidad. Ha trabajado en más de 50 películas desde que debutó en 1995, a los 10 años, y ha sido nominada en dos ocasiones a los premios Óscar (2006 y 2015).

Entre sus filmes más famosos están Piratas del Caribe (2003-2007), Orgullo y Prejuicio (2005), La duquesa (2008), Expiación (2011), Anna Karenina (2012) y El código enigma (2014).

¿Notas un patrón ahí? Pues sí… ninguna de esas películas está ambientada en la actualidad. La mayoría de las cintas en las que participa son dramas históricos.

Y eso no es coincidencia, sino que es totalmente intencional. Así lo reconoció la actriz en entrevista con la revista estadounidense Variety, que realizó para promocionar su nueva película, Colette, inspirada en la vida de la famosa novelista francesa nacida en 1873 (sorpresa: otra cinta histórica).

Allí, Knightley explicó que “en realidad no hago muchos filmes ambientados en la época actual porque los personajes femeninos casi siempre son violados. Siempre encuentro algo de mal gusto en la forma que las mujeres son representadas, mientras que siempre he hallado personajes muy inspiradores en las piezas históricas que me ofrecen“.

Sin embargo, no todo es malo: cree que la situación está mejorando.

“Ha habido una mejora. De pronto comenzaron a enviarme guiones sobre mujeres actuales que no son violadas en las primeras cinco páginas y que no están ahí simplemente para ser la ‘querida novia’ o la ‘esposa"”, recalcó.

En la misma línea, contó que si bien hay varias mujeres trabajando en escribir guiones para películas, sigue sin haber tantas directoras.

“Hay bastantes guiones escritos por mujeres, son las directoras las que están extremadamente ausentes. He trabajado con algunas directoras y todas han sido maravillosas. No siempre les es fácil lograr levantar otro proyecto, incluso cuando los filmes que hemos hecho han recibido muy buenas críticas. Ese es un gran problema”, expresó.

Al respecto, concluyó que “cuando hay mujeres como guionistas, directoras y productoras, los personajes femeninos son mejores, y la forma en que la sociedad ve a las mujeres a través del drama es mucho mejor”.